El arzobispo de Madrid y vicepresidente de la Conferencia Episcopal, Carlos Osoro, cree que se está «interpretando mal» todo el asunto relacionado con el piso en el que vive ahora su antecesor, Antonio María Rouco Varela, y ha negado que la reforma de esta casa haya costado 500.000 euros.
En una entrevista con la Cadena Ser, recogida por Europa Press, Osoro ha explicado que es un piso que pertenece a una Fundación y «que alguien lo dejó ahí para la iglesia». «Se ha ido a vivir a ese lugar pero no se ha comprado nada», ha asegurado, destacando que es «imposible» que la reforma haya costado medio millón de euros.
En este punto, ha indicado que «hay que conocer» por dentro a Rouco Varela. «He sido alumno de él en Salamanca y cuando se le conoce no creo que se le puede interpretar de esa manera», ha aseverado, preguntado por qué opinión le merece el supuesto gasto en la reforma de la vivienda.
Osoro ha explicado que en estos momentos vive con las Hermanitas de Aravaca, porque cuando llegó de Valencia todavía no había tomado posesión y entendió que era mejor quedarse allí. Sin embargo, en cuanto pueda, se irá a la Archidiócesis, donde estaba el anterior arzobispo.
Preguntado por si su tarjeta de presentación fue romper con la tradicional Misa de la Familia en la plaza de Colón, celebrada en años anteriores con Rouco Varela, el arzobispo ha indicado que él entiende que la Iglesia es «una historia de amor que se tiene que escribir para todos los hombres» y que eso lo tenía que hacer de una forma «muy en concreto» con las familias de «tú a tú».
Y así lo hizo, ha asegurado, durante más de diez horas en la catedral de la Almudena, donde sólo paro un cuarto de hora para salir al baño, ha explicado.