El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Antonio Miguel Carmona, ha admitido este martes que no conoce al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Madrid, porque su relación es con la alcaldesa, Manuela Carmena, pero ha recordado que el suyo es un «apoyo vigilante» y «cualquier error, ocurrencia o exceso que alguien pretenda llevar a cabo tendrá el voto en contra del PSOE.
«Espero que el cambio en Madrid sea tranquilo y yo trato de garantizar que sea así», ha dicho en declaraciones a la Cope, en las que ha subrayado que él lleva 48 horas hablando con medios internacionales, con inversores extranjeros «y del Ibex» y con el vicepresidente de la Comunidad Judía, David Hatchwell, para frenar el «deterioro» que ha sufrido la imagen de Madrid por el caso del concejal Guillermo Zapata.
Carmona ha insistido en que a él le habría gustado que Zapata dejase no sólo la responsabilidad de cultura sino también su acta de concejal, pero que ésta es personal e intransferible y no se la puede retirar Carmena. «Si le hubiese pasado a un concejal de mi grupo le habría exigido que entregase el acta», ha dicho.
El socialista también ha tachado de «barbaridad» algunos de los tuits del también concejal Pablo Soto (hablando de matar a políticos o de «empalar» al entonces diputado de UPyD Toni Cantó) y ha añadido que «estas cosas hay que pararlas», igual que «el incidente» de los insultos que sufrió la portavoz de Ciudadanos, Begoña Villacís, al salir del pleno. No obstante, no ha precisado qué medidas habría que tomar en estos casos.
Eso sí, ha confiando en poder dejar de dedicarse a hablar con medios e inversores para poder centrarse en lo que el PSOE ha acordado con Ahora Madrid, combatir la pobreza infantil, un plan de empleo y mejorar el medio ambiente.