La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado al juez Santiago Pedraz que cite a declarar como imputado al concejal de Ahora Madrid Guillermo Zapata por un supuesto delito de humillación a las víctimas del terrorismo que habría cometido al escribir en la red social Twitter varios mensajes «humillantes y vejatorios», entre otros, contra la víctima de ETA Irene Villa.
En un escrito hecho público este jueves, la fiscal Blanca Rodríguez considera que sus comentarios, entre ellos uno en el que decía 'Han tenido que cerrar el cementerio de las niñas de Alcàsser para que no vaya Irene Villa a por repuestos', entrañan «descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas de los delitos terroristas y de sus familiares«.
Además de este tuit, que el edil escribió el 31 de enero de 2011 con un usuario llamado @casiopeaexpres, el informe del Ministerio Público menciona un segundo mensaje publicado el mismo día en el que reproduce un chiste sobre el Holocausto: «¿Cómo meterías a cinco millones de judíos en un 600? En el cenicero».
Hasta dos años de cárcel
La fiscal señala que la conducta del concejal, más allá de la restricción de la libertad de expresión que podría suponer, podría ser constitutiva de un delito tipificado en el artículo 578 del Código Penal, que persigue tanto el enaltecimiento del terrorismo como la humillación de las víctimas y está castigado con penas de hasta dos años de cárcel.
A su juicio, el contenido del mensaje sobre Irene Villa, que el concejal contextualizó en un debate en la red social sobre los límites del humor, puede ser «objetivamente vejatorio y humillante para la destinataria víctima del terrorismo en particular y en general para todas las víctimas que de una forma u otra lo han sido del terrorismo de la organización terrorista ETA».
Tras apuntar la necesidad de «perseguir las conductas de quienes calumnian o humillan a las víctimas al tiempo que incrementen el terror de sus familiares», el escrito de la Fiscalía señala que los comentarios del edil «generan la perplejidad e indignación en la sociedad que les hace merecedores del reproche general».
Según detalla la fiscal Rodríguez, las expresiones proferidas por Zapata responden a los criterios fijados por el Tribunal Supremo para que su conducta pueda constituir un delito de humillación a las víctimas por reunir los conceptos de «descrédito (disminución o pérdida de la reputación de las personas o del valor y estima de las cosas)», «menosprecio (poco aprecio, poca estimación, despecio o desdén)» y «humillación (herir el amor propio o dignidad de alguien)».
La fiscal también pide que la asociación Dignidad y Justicia, que interpuso una querella contra Zapata por estos hechos, aporte una fianza de 20.000 euros para personarse como acusación popular en el procedimiento.