La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, considera «alucinante» que el juez instructor del caso Púnica sugiera que puede haber financiación ilegal de la formación en Madrid y cree que ello lleva a que se tenga que estudiar solicitar su personación en la causa. Así lo ha dicho a los medios de comunicación a las puertas del edificio que okupó el colectivo Patio Maravillas en la calle Divino Pastor, en el barrio de Malasaña.
La también portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid se refiere a las valoraciones del juez de la Audiencia Nacional durante las declaraciones que tomó a varios imputados en el caso. Asegura que no ha visto «ningún indicio» que lleve a sostener que hubo financiación irregular y «niega absolutamente y totalmente» esa posibilidad.
También ha recalcado que el PP de Madrid nunca ha contactado con el empresario Alejandro de Pedro, considerado uno de los cabecillas de la trama. A su vez, ha remarcado que tampoco lo hizo para el gobierno de la Comunidad de Madrid que ella presidía.
A su vez, Aguirre ha recordado que «cuando todo esto surge» era el año 2011 y el exsecretario general del PP de Madrid Francisco Granados ya no ocupaba ese cargo ni «tenía que ver nada con la financiación irregular».
«El juez de la trama Púnica, quizás porque tenía esa idea en la cabeza, pues lo dijo en la declaración grabada pero yo quisiera que dijera si hay algún indicio porque si no, nos tendremos que personar como PP de Madrid para que explique qué hay ahí, porque no hay absolutamente nada», ha apostillado Aguirre.
Ha insistido en que se quedó «alucinada» cuando supo que había un juez que sugería financiación irregular cuando «no hay absolutamente nada» y por tanto estudiarán la posibilidad de personarse en la causa.
«La corrupción es algo que rechazamos desde el minuto uno en el PP de Madrid», ha insistido Aguirre para recordar que se cesó en su partido a personas relacionadas con casos de corrupción «mucho antes de que se les imputara», en referencia por ejemplo al exconsejero Alberto López Viejo (caso Gürtel) y a varios alcaldes que ella no puso, sino que se «encontró ya».
En el caso de Granados, ha relatado que le cesó por su «deslealtad para con el Gobierno regional» que ella presidía y lo hizo tras las generales «para no hacer ruido».