La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, ha considerado este lunes que la auditoría encargada por el Consistorio para analizar la situación de la deuda municipal no es tal cosa, sino «un juicio popular con el objetivo de criminalizar a equipo de gobierno anterior».
En rueda de prensa tras reunirse con el Grupo Municipal Popular, Aguirre ha hablado de «desnaturalización del lenguaje» al llamar auditoría a algo que, en su opinión, no es tal cosa, sino «un juicio popular con objetivo de criminalizar al equipo de gobierno anterior».
En este punto ha criticado la creación de una Subdirección General de Auditoría de la deuda y políticas públicas que creían que dependía de la Intervención General, cuando ahora saben que no es así, sino que depende «directamente del concejal» cuando en la Intervención General hay una Subdirección General de Auditoría.
«Esto es una duplicidad que habrá que pensar si este gasto de dinero público tiene alguna consecuencia», ha indicado para añadir que, a su juicio, lo más «importante es el flagrante incumplimiento del acuerdo plenario del 22 de junio», que decía que auditoría la realizaría la Intervención General del Ayuntamiento de Madrid, «como dice la Ley».
«En flagrante incumplimiento de ese acuerdo plenario se le quita a la Intervención del Ayuntamiento esa auditoría y se le da a un subdirector general que será funcionario pero se le hace depender directamente del concejal de Hacienda», ha denunciado.
También a este respecto, ha señalado que «se ha dicho que estas auditorías pretenden delimitar si algunas decisiones legales son ilegítimas. «En democracia las decisiones legales son legítimas», ha defendido Aguirre.