La diputada regional en la Asamblea de Madrid por Ciudadanos Eva Borox ha negado haber recibido regalos de David Marjaliza, el empresario de Valdemoro y presunto líder de la trama Púnica, al tiempo que ha recordado que fue ella en su etapa como portavoz del PSOE la que denunció irregularidades en el Ayuntamiento que presidía entonces Francisco Granados.
Así se ha manifestado Borox después de conocer que el propio Marjaliza habría reconocido que pagó viajes y regaló billetes de lotería premiados tanto a la ahora diputada regional como a su marido, Raúl del Olmo, actualmente primer teniente de alcalde de Valdemoro y concejal de Ciudadanos en la localidad, tal y como publica el diario 'El Mundo'.
Borox ha recordado que ya el pasado 24 de julio manifestó en rueda de prensa que no había recibido regalos ni estuvo implicada en la presunta trama de corrupción en su época como portavoz socialista, y ha señalado que de hecho ella «nunca tuvo decisión para la adjudicación de nada», ya que el PP gobernaba en mayoría absoluta.
Además ha indicado que durante el año que estuvo como portavoz socialista puso «algunas denuncias sobre la gestión que estaba haciendo el PP», cuya documentación trasladó al PSM, partido al que entonces pertenecía, y por lo que tuvo «bastantes represalias dentro del Ayuntamiento».
Al respecto Borox ha manifestado que tras denunciar varias irregularidades, tuvo que trabajar en un sótano «sin luz ni ventilación» y su marido, Del Olmo, «fue puesto en la calle» cuando desempeñaba su labor de policía local por el sucesor de Granados, José Miguel Moreno Torres, también implicado en la Púnica.