La Dirección General de Recursos Humanos de la Consejería de Educación ha decidido abrir expediente disciplinario a la directora del colegio público Concepción Arenal de Getafe para esclarecer si existen responsabilidades por la caída el pasado 20 de noviembre de niña de 4 años desde la ventada del colegio durante el recreo.
La inspección educativa de la Dirección de Área Territorial-Sur ha finalizado y trasladado a la Consejería su informe realizado sobre estos hechos, que motivaron la hospitalización de la menor a raíz de las lesiones sufridas, según explican fuentes del departamento. A raíz de las conclusiones del informe se incoa expediente.
La Dirección General de Recursos Humanos ha nombrado a un inspector educativo que se encarga a partir de ahora de la instrucción de dicho expediente disciplinario.
La alumna de 4 años resulto herida grave tras caerse por una ventana del colegio, al parecer de forma accidental, con una altura aproximada de cuatro metros, según informaron entonces fuentes de Emergencias 112 Comunidad de Madrid. Se comprobó que la menor sufría un traumatismo craneoencefálico severo y fue trasladada al Hospital 12 de Octubre en estado grave.
Por su parte, la Consejería de Educación, tras conocer lo ocurrido, personó en el centro a la inspección educativa y remitió también apoyo psicológico.
Tras lo ocurrido, su familia manifestó que «estaba estudiando emprender acciones legales contra los responsables», después de haber acusado este sábado al claustro de «no vigilar suficientemente al alumnado durante los recreos».
Un portavoz de la familia comentó a Europa Press que los profesores les comentaron que, durante los recreos, «las clases están abiertas y pueden ir al baño cuando quieran», y que se dieron cuenta de la ausencia de Leire cuando vieron «que su abrigo estaba en la arena». «La directora no supo dar una explicación racional», han agregado.
Por ello, afirmó que tras la conversación les quedó «sensación de inseguridad», y han solicitado que «se pongan otras medidas» para evitar que niños de tan corta edad puedan «campar a sus anchas» durante los recreos.