La capital se viste de luces y adornos navideños para dar la bienvenida a esta fiesta tan familiar. Casetas, belenes, pistas de hielo y espectáculos para los más pequeños hacen de Madrid una ciudad muy navideña.
La palabra mercadillo es una de las más sonadas en estas fechas. Como todos los años, la Plaza Mayor se rodea de casetas de todo tipo, donde adquirir adornos navideños, gorritos de reno o estatuillas para completar el Belén. Más de cien casetas por las que hacer un recorrido muy festivo. Los puestos están abiertos al público desde las 10:00 hasta las 21:00 horas. Es la feria navideña más famosa, pero no la única. Unos metros más arriba se encuentra el mercadillo de la Plaza de Jacinto Benavente, éste dedicado a la artesanía, igual que el de Plaza de España. Ambos están abiertos desde primera hora de la mañana, hasta pasadas las 21:00 horas.
La Comunidad de Madrid desarrolla lo que ha denominado ‘Navidad en Sol’. Y es que Postas y la Real Casa de Correos tienen un programa navideño de lo más variado. Desde un Belén gigante, de más de 150 metros cuadrados; pasando por un Bosque de los deseos donde los más pequeños puedes escribir el suyo y después colgarlo en uno de los árboles del bosque; hasta una Casa de Papá Noel. Una completa serie de actividades tanto para niños como para adultos, que estarán abiertas todos los días hasta el 6 de enero, de 10:00 a 21:00 horas. La idea ha llamado tanto la atención que, a pocos días de su apertura, ya han pasado por él 22.500 personas, según informa la Comunidad.
Lo que no podía faltar es el espectáculo por excelencia de El Corte Inglés: Cortylandia. Este año el tren está conducido por el lobo de las nieves, seguido de vagones con diferentes pasajeros que ha ido recogiendo a lo largo de sus viajes por la Navidad. Cada día hay varias representaciones y cada una de ellas tiene una duración de 15 minutos. Una pequeña historia que encandila a los más pequeños de la casa.
El recorrido que no podía terminar sin una visita a la Chocolatería San Ginés (Pasadizo San Ginés, 5). Uno de los sitios más populares de la ciudad y que se llena, aún más, en época navideña. Sus estufas en la calle provocan que todos quieran sentarse a tomar un chocolate caliente con churros, a pesar de los vientos de diciembre.
Mucho más
Si se piensa, es que existe, y es que la capital ofrece multitud de posibilidades. Para los más soñadores y los que quieran tocar las estrellas de noche, Madrid les ofrece el Navibús. Un autobús navideño que recorre las calles más características bajo la iluminación navideña. Por esto mismo ambos horarios coinciden: desde las 18:00 hasta las 23:00 horas. El tiempo estimado del recorrido es de unos 45 minutos y se coge en la Calle Serrano, frente al número 30.
Al pasar por Sol, habitualmente hay gente disfrazada de algún dibujo animado. En época navideña, los disfraces cambian por los de los Reyes Magos, Papá Noel o incluso árboles de navidad, como se puede ver en la misma Plaza Mayor.
Y para completar el panorama, Madrid se rodea de pistas de hielo. Además de la ya famosa en Xanadú, que no tiene nada de especial en esta época, hay otras que se instalan únicamente hasta el día de Reyes. La Plaza de Callao está dedicada a los más pequeños, ya que solo pueden usarla quienes tengan entre 4 y 12 años. Pero la Plaza de Colón y la de la Luna permiten el acceso al resto. Los precios son muy asequibles e incluyen el alquiler de los patines por el tiempo que se esté en la pista. Cientos de planes que hacer en Madrid para disfrutar de la Navidad.