El Ayuntamiento de Madrid va a proceder a reponer la placa en reconocimiento y homenaje a ocho beatos carmelitas asesinados en la Guerra Civil, en el cementerio parroquial de Carabanchel Bajo, al haber sido retirada por error.
Fuentes municipales han explicado que esta tarde se ha celebrado una reunión del equipo jurídico del Ayuntamiento de Madrid, donde se ha determinado que la retirada de la misma, en el marco de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica, ha sido un error.
Así, han detallado que la equivocación ha sido en la transmisión técnica de la información sobre este asunto y que se va a proceder a su recolocación en este cementerio, de propiedad privada, pues pertenece a la parroquia San Sebastián Mártir.
El Precisamente, el propio Arzobispado de Madrid ha emitido un comunicado esperando que se tratara de una «confusión», pues supondría una «inadecuada aplicación de la Ley de Memoria Histórica, dada la exclusiva condición de víctimas de los carmelitas, pacíficos testigos de la reconciliación a la que todos debemos contribuir».
Esta reunión se ha celebrado de forma paralela a la rueda de prensa que ha dado la delegada de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid, Celia Mayer, donde ha justificado con «informaciones técnicas», bajo el paraguas de la Ley de Memoria Histórica, la retirada de vestigios franquistas «de titularidad municipal».
Mayer ha explicado a la prensa que el área que dirige tiene la competencia para aplicar la Ley de Memoria Histórica en vestigios de titularidad municipal, ya que los retirados «no son de titularidad privada». Es por ello que «no es necesaria ninguna autorización reglamentaria para proceder a su retirada», ni tan siquiera un decreto.
En este punto, la delegada remarcaba que «es de titularidad municipal» la placa dedicada a los frailes carmelitas fusilados en 1936, hasta ahora en el Cementerio Parroquial de Carabanchel, aunque el recinto sea privado al pertenecer a la Iglesia.