“A partir de ahora el 112 será un aliado de este colectivo y responderá de manera rápida y especializada contra los delitos de odio”. Así de contundente se ha expresado Cristina Cifuentes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, a la que también han acudido varios colectivos LGTBI, en la que ha explicado que tanto el 112 como las Unidades de Emergencia Social atenderán de manera especializada las agresiones LGTBIfóbicas. Según el Ejecutivo regional, el objetivo consiste en animar a las víctimas de delitos de odio a formular sus denuncias y atenderlas de manera especializada. “Es fundamental que haya denuncias porque entonces no hay actuación policial”, ha afirmado Cifuentes.
Según Cifuentes, se pondrá en marcha un protocolo de actuación de las Unidades Móviles de Emergencia Social de la Comunidad de Madrid, de conformidad con las competencias territoriales, que serán activadas a través del 112, en cuanto se detecte una agresión o situación de emergencia por motivos de orientación sexual o identidad o expresión de género, que de manera espontánea sea informada por la persona que llame. “Es un paso importante, aunque hay que dar muchos más”, ha manifestado Cifuentes.
Además, estas unidades, tal y como ha explicado la presidenta regional, ya cuentan con la formación necesaria y las instrucciones de actuación en los casos de agresión y emergencias. Es más, las Unidades de Emergencia Social actuarán como dispositivo público de atención 24 horas al día todos los días del año. Por otro lado, también se pondrá en marcha una campaña de concienciación que se instalará en centros educativos, sanitarios y medios de transportes.
Según datos proporcionados por el Ministerio del Interior, en 2015 se produjeron 169 agresiones LGTBIfóbicas en España de las cuales 19 de ellas fueron en la Comunidad de Madrid. Los datos del Programa LGTBI de la Comunidad de Madrid contemplan que los perfiles más característicos de las víctimas son el de una pareja homosexual que realiza muestras de afecto en público y menores de 30 años. Este tipo de agresiones, según el Gobierno de la región, suelen producirse en torno al fin de semana, en concreto de madrugada, coincidiendo con el horario de salida de las discotecas.
Marina García-Rico