Entre el 15 de junio y el 15 de septiembre los trabajadores dependientes del Consistorio pueden abandonar su puesto de trabajo una hora antes, según lo acordado en la Mesa General por la Administración y los Sindicatos del 29 de mayo. Pero hay tres grupos de funcionarios que no podrán acogerse a esta medida: los policías municipales, los bomberos y los empleados del Samur. El Ayuntamiento entiende que estos tres cuerpos son colectivos con jornadas y horarios especiales y no puede acogerse a esta modificación.
La Policía Municipal entiende que su situación no es como la del resto de empleados públicos, pero exige que al menos esas horas de menos que no van a disfrutar se acumulen en forma de días libres para poder disfrutarlos durante el año. En años anteriores todos los agentes del cuerpo local disfrutaban de siete días libres por el perjuicio que sufrían en verano. “Es lógico que no podamos disfrutar de esta hora de menos teniendo en cuenta que habría comisarías que por el cambio de turno se quedarían sin agentes”, explican desde el sindicato CSIT.
Sin embargo, el sindicato CPPM denuncia que este curso el Consistorio ha denegado el disfrute de esa semana libre a todo el gremio. De hecho, la central ha elevado esta queja pública a los Juzgados de lo Contencioso-Administrativo de Madrid al entender que sufren “una discriminación” con respecto al resto de funcionarios públicos del Ayuntamiento. El colectivo de policías municipales defiende que “tienen derecho a las reducciones de jornada que con carácter general se establezcan” en la Mesa General.
Desde el CSIT no son tan tajantes como sus compañeros del CPPM, pero sí aseguran que de no otorgarles los días también tomarán medidas judiciales. “El 29 de junio nos han citado en el Ayuntamiento para negociar esas horas que nos deben por no disfrutar la jornada de verano. Sí nos deniegan los siete días libres que hemos tenido desde hace cuatro años, sí estudiaremos defender nuestro derecho por otras vías”, afirma José Francisco Horcajo, responsable de Policía Municipal de Madrid del CSIT. Por su parte, el CPPM asegura que “no se puede negociar nada” porque el acuerdo “ya está cerrado”.
Padres discriminados
Pero el agravio comparativo supuestamente realizado por el Consistorio no acaba aquí. Este año Carmena y su equipo han querido premiar a sus trabajadores con hijos de menores de 12 años con la ampliación del horario de verano desde el 1 de junio hasta el 1 de octubre. Es decir, los empleados públicos que tengan niños de entre cero y doce años podrán disfrutar de una hora menos de trabajo que el resto de sus compañeros del 1 al 15 de junio y del 15 al 31 de septiembre.
En este punto, la Policía Municipal, al igual que los Bomberos y el Samur, vuelve a salir perjudicada. Los tres cuerpos han quedado excluidos, por lo que los menores no podrán disfrutar de la compañía de sus padres una hora más simplemente por el hecho de pertenecer a lo que el Consistorio denomina como un colectivo con jornadas y horarios especiales. Por tanto, la conciliación familiar que pregona el Consistorio no tiene cabida entre las fuerzas de seguridad locales.
Esta cuestión sí ha encontrado la defensa consensuada de todo el colectivo sindical de la Policía Municipal. De hecho, todas las centrales van a exigir una compensación para los agentes que no vayan a disfrutar de estas horas pese a tener hijos menores de 12 años.
De momento, la decisión ha despertado malestar entre unos agentes municipales que durante estos días celebran la festividad de su patrón con un programa renovado y con la ausencia de la Misa y del desfile tradicional del cuerpo. De hecho, a la salida de la entrega de medallas honoríficas a los agentes, la portavoz del PP en el Ayuntamiento, Esperanza Aguirre señaló que consideraba “vergonzante y vergonzoso” una celebración “tan clandestina”. Además, sindicatos como el CPPM ni siquiera han acudido al evento debido a las grandes discrepancias que existen con Javier Barbero, concejal de Seguridad.
Carlos Lospitao