Madrid, al igual que otras capitales europeas, tiene desde hoy un monumento dedicado a los héroes de la Revolución Húngara de 1956 que se alzaron contra el dominio de la URSS. La revuelta que se inició el 23 de octubre de aquel año, en plena Guerra Fría, fue aplastada con extrema dureza por las tropas soviéticas. El monumento fue inaugurado este miércoles en el parque de la calle Budapest situado en el distrito de San Blas-Canillejas.
A la inauguración asistieron, entre otras autoridades, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, la embajadora de Hungría en nuestro país, Enikö Györi, el vicepresidente de la Asamblea Nacional Húngara, Istvan Jakab, los portavoces de los grupos municipales en el Ayuntamiento de Madrid, la concejala del distrito, Marta Gómez de Lahoz, y miembros de la comunidad húngara en Madrid.
El monumento ha sido una iniciativa de la Embajada de Hungría en España y de la comunidad húngara en la ciudad, para que en un espacio público se emplazara un monumento en homenaje a esta revolución, cuando se conmemora el 60º aniversario de aquel hecho histórico. El monumento fue aprobado por unanimidad el pasado 30 de marzo en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid, aunque no sin polémica. En la votación se ausentaron cinco miembros de Ahora Madrid, entre ellos Mauricio Valiente y Carlos Sánchez Mato. El monumento, titulado “Patria”, es obra del artista húngaro afincado en España Zoltán Gábor.
¡Carmena, dimisión!
Durante la inauguración, a la que acudieron un centenar de personas, se escucharon gritos de ¡Carmena, dimisión! La alcaldesa intentó tranquilizar la situación: “No pasa nada. Unos piensan una cosa y otros otra. Ésa es la maravilla de la libertad”, respondió a quien la increpaba.
Carmena recordó que, en su día, accedió de inmediato a la propuesta de la embajada húngara para erigir el monumento y espera sea “un ejemplo de la mejora constante de la humanidad, porque la humanidad siempre camina hacia adelante”. “Como alcaldesa, señaló, me siento orgullosa de permitir que nuestros parques y jardines se llenen de historias de otros países, porque si sufren en un país sufrimos nosotros; si sufren en Siria, nosotros tenemos que sufrir con ellos; si sufren los refugiados, nosotros con ellos”, añadió la regidora de Madrid.
Asimismo, la embajadora Enikö Györi agradeció la decisión y la solidaridad del Ayuntamiento de Madrid para hacer posible este monumento. El Presidente del Tribunal Supremo húngaro Peter Darák, asistente al acto, destacó que la Revolución del ´56 “fue fundamental para el renacimiento democrático de Hungría”. Por su parte, la Vicepresidenta 3ª del Congreso de los Diputados Rosa Romero, afirmó que la conducta de quienes participaron en aquella revolución “es un referente a seguir para todos los que luchan por los derechos humanos en Europa”. El acto concluyó con la colocación de diversas coronas de flores en recuerdo de los que perdieron la vida durante el levantamiento.
Francisco J. Castañón