El incendio desatado en el Ayuntamiento de Coslada por el alcalde socialista Ángel Viveros al mandar al Grupo de «no adscritos» a los tres concejales de IUCM-Los Verdes acogiéndose a la legislación antitransfuguismo, pone en peligro siete gobiernos de izquierdas del cinturón sur de la Comunidad de Madrid, donde residen más de un millón de ciudadanos. Y varios sectores socialistas ya señalan a una culpable: la secretaria general del PSOE-M, Sara Hernández. “Debilidad” y “falta de liderazgo” es lo que alegan varias fuentes socialistas consultadas por Estrella Digital, que no entienden que no haya podido controlar esta situación.
El origen de este conflicto protagonizado por el PSOE e IUCM-Los Verdes, que en junio de 2015 permitió que los socialistas gobernaran en Coslada, se remonta a verano de este año, cuando el grupo municipal de IUCM-LV denunció al Ayuntamiento ante la Fiscalía Especial Anticorrupción por un supuesto delito de prevaricación en la prestación del servicio de cafetería en las pistas de tenis La Cañada. Desde entonces, la relación entre ambas agrupaciones municipales no ha sido sencilla. Y ha llegado a su cenit esta semana, cuando el secretario del Ayuntamiento decidió incluir en el orden del día para el pleno del 15 de diciembre dar cuenta del paso al Grupo de “no adscritos de los concejales Pedro San Frutos, Paloma Castejón y Jorge Martín García», de IUCM-Los Verdes, al aplicarles la legislación antitránsfuga, a petición de IU Federal.
La versión oficial de la dirección regional del PSOE es que se están manteniendo conversaciones con el Ayuntamiento de Coslada y se le ha pedido que remita la carta del Secretario en el que se toma esta decisión. Desde la secretaría general niegan que ellos hayan propiciado este desenlace. E insisten en que están “intentado tener todas las claves para solucionar el problema”. No obstante, desde IUCM aseguran que este problema no es nuevo, puesto que el requerimiento por parte de IU Federal para que el ayuntamiento de Coslada mandara al Grupo de no adscritos a sus concejales llegó el pasado septiembre.
Entonces, varios concejales de IUCM-Los Verdes, de otros municipios madrileños, alertaron a sus alcaldes de esta situación. Este fue el caso, por ejemplo, de Arganda del Rey. Su alcalde, Guillermo Hita, desde el inicio mostró preocupación, puesto que él gobierna también con IUCM-Los Verdes, y habló con el alcalde de Coslada. También se comprometió a transmitir su preocupación al partido. Y así lo hizo. Pero finalmente, a la dirección regional, liderada por Sara Hernández, le ha estallado esta bomba en la cara. Hoy, el sector crítico no ha dudado en señalarla como la principal culpable. “No controla nada en el partido”, aseguran.
Aunque desde IUCM advierten de un problema mayor si lo de Coslada finalmente prospera este jueves y sus concejales pasan al Grupo de no adscritos. Y es que Podemos “podría tomar la iniciativa y plantear el caso de Coslada como precedente jurídico en los municipios de la Comunidad de Madrid, sustituyendo la fracasada estrategia de Alberto Garzón de enviar requerimientos para inhabilitar a representantes de IUCM-Los Verdes”.
No obstante, las fuentes socialistas consultadas no parecen interesadas en este desenlace, puesto que no han perdido de vista que esto podría comprometer gobiernos tan importantes como el de Getafe, Móstoles, Leganés, Fuenlabrada, Arganda o Alcalá de Henares, donde el PSOE gobierna en minoría con el apoyo de IUCM. En el caso de Arganda, tanto el alcalde, Guillermo Hita, como uno de los concejales de IUCM-Los Verdes, Jorge Canto, desean que esta guerra “sólo se circunscriba al ámbito local de Coslada” y no se extienda al resto de municipios.
IUCM-Los Verdes Coslada se querellará contra el alcalde
Por el momento, los concejales de IUCM-Los Verdes Coslada ya están preparados para acudir a los tribunales si la dirección regional del PSOE no logra frenar su expulsión al Grupo de no adscritos por tránsfugas. Y están convencidos de que tienen la ley de su parte. “Nosotros nos presentamos a las elecciones con una coalición electoral IUCM-Los Verdes. Montamos nuestro grupo municipal. Nadie se ha ido del grupo y a nadie se le ha echado. IUCM certifica que seguimos siendo militantes. Los verdes dicen que somos sus representantes legítimos. Y el representante de la coalición electoral dice que somos los representantes en Coslada de esa coalición electoral”, explica Pedro San Frutos, concejal en Coslada, que asegura que también se querellarán contra el alcalde y el secretario “por prevaricación”.
San Frutos cree que todo este conflicto tiene dos claras vertientes. Por un lado, su negativa a incluirse en el proyecto de Podemos. Y por otro lado, el miedo del alcalde socialista a “perder su sillón” a través de una moción de censura. “Las últimas votaciones importantes las ha perdido. Ya tuvimos problemas con la aprobación de los presupuestos. Es posible que tema que el siguiente paso sea echarle de la alcaldía”.
Con la decisión de calificar a los concejales de IUCM-Los Verdes de “no adscritos”, se libra de una moción de censura. La oposición ya no tendría margen de maniobra para echarle. En la reforma de la Ley Electoral de 2011, se acordó que a la hora de presentar mociones de censura en los ayuntamientos, para que salgan adelante no bastará con la mayoría simple, sino que se exigirá un voto más por cada tránsfuga que firme la moción. Estrella Digital ha intentado contactar con el Ayuntamiento de Coslada para conocer su versión a este respecto, pero no ha obtenido respuesta.
Elsa S. Vejo