La Comunidad de Madrid y por su parte, la villa de Móstoles, celebran durante estos días y especialmente, este martes dos de mayo, la osadía que convirtió al pueblo madrileño en protagonista de la sublevación española contra las tropas napoleónicas y a la localidad de mostoleña en promotora de ésta.
Procedan vuestras mercedes, a tomar las más activas providencias para escarmentar tal perfidia -la francesa-, acudiendo al socorro de Madrid y demás pueblos, y alistándonos, pues no hay fuerza que prevalezca contra quien es leal y valiente, como los españoles lo son.
Móstoles, 2 de mayo de 1808.
Con estas palabras de Don Andrés Torrejón y Simón Hernández, alcaldes de Móstoles, se iniciaba el levantamiento que, junto con otros acontecimientos, dio lugar a la guerra de seis años, tras la que España consiguió poner fin al intento de soberanía que Francia buscaba obtener sobre nuestro país: La Guerra de la Independencia.
Historia de una traición contestada con un alzamiento popular
En 1807 se firmó un acuerdo franco-español, por medio del cual se establecía el reparto de Portugal, tras la invasión de Lisboa, por parte del ejército formado entre soldados españoles y franceses. Una vez las tropas francesas pululaban por territorio español, la inestabilidad monarquica en España, con las abdicaciones de Carlos IV y de su hijo Fernando VII, propiciaron que Napoleón aprovechara la situación política y la presencia de sus combatientes para invadir España e intentar convertirla en parte de su imperio.
Llegó entonces la mañana del dos de mayo de 1808, cuando tras una batalla en Madrid en la que la población civil, a pesar de luchar fervientemente con armas de lo más rudimentarias contra las tropas invasoras, sufrió una terrible matanza. Los alcaldes de Móstoles firmaron entonces el texto conocido como el Bando de los alcaldes, por medio del cual se quería informar al resto de España de lo que estaba sucediendo en Madrid y provocar así toda una sublevación nacional.
Mito o historia
La Guerra en sí no fue la consecuencia directa de la osadía que demostraron los madrileños, ni de la firma del Bando, a pesar de las muchas versiones sobre ello, pero éstas sí fueron algo necesario para alentar y alertar a toda la población española sobre el peligro que corría una nación, que por entonces era aliada de Francia.
Gracias a la carta de los alcaldes de Móstoles, la noticia se extendió como la pólvora y comenzó a desatar una conciencia patriótica que pronto vería como resultado, el fin de una invasión.
A pesar de las diferentes interpretaciones que pueden encontrarse sobre lo que realmente pasó aquel mes de mayo de 1808, lo que sí pueden conmemorar con orgullo los madrileños es el aniversario de la unión que hubo en su ciudad para luchar por la libertad y contra la dominación extranjera.
Precisamente por ello, estos días se celebran, tanto en Madrid capital, como en el municipo de Móstoles, numerosas actividades para disfrutar en familia o con amigos, como teatros o representaciones, conciertos, batucadas, carreras y clases de baile o yoga al aire libre.
Marta de la Fuente