Los líos internos que sufre el cuerpo de seguridad local han tapado las deficiencias materiales que sufren los agentes en unos meses donde comienza a parecer el frío invernal. Son varias las quejas que han recibido durante las últimas semana los sindicatos con respecto al nuevo uniforme de la Policía Municipal. A día de hoy, no todos los agentes disponen de la cazadora reglamentaria y muchos de ellos afirman que en multitud de ocasiones deben de permanecer en el interior de las unidades porque con el uniforme es imposible soportar las bajas temperaturas de la capital. Además, las centrales afirman que los interiores de los vehículos no se limpian y los olores son insufribles.
Desde el pasado mes de febrero, el Ayuntamiento de Madrid comenzó a repartir los nuevos uniformes a sus agentes del cuerpo de seguridad local. El color no fue del agrado de los policías, pero lo cierto es que el material y el coste de producción convencieron a propios y extraños. Transcurridos algunos meses, los policías comprobaron que con el paso del tiempo y los lavados el tejido comenzaba a sufrir. Con muy pocos días de uso, ya aparecieron las primeras costuras abiertas en algunas camisetas. Además, el pantalón, muy útil en principio para el invierno, resultó ser demasiado caluroso con temperaturas altas. De hecho, este problema generó mucha preocupación durante el mes de mayo porque todavía no había comenzado ni siquiera el verano.
En esta ocasión, son las bajas temperaturas y un aislamiento deficiente el que ha generado las quejas de algunos agentes. «Hay multitud de policías que todavía no disponen de la cazadora del nuevo uniforme y que afirman pasar mucho frío. La situación ha llegado ha supuesto que muchos de ellos hayan decidido quedarse en el interior de las unidades para no pasar frío», afirman desde CSIT UP. Además, desde la central afirman que la ropa térmica no es suficiente para hacer frente a las bajas temperaturas de Madrid: «Vamos a proponer al consistorio la mejora o la ampliación de nuestro uniforme, porque hemos notado algunas deficiencias en el mismo a la hora de combatir el frío».
Los últimos episodios polémicos dentro del cuerpo local con tres agentes expedientados han tapado las carencias de material que sufre la Policía Municipal de Madrid, pero los sindicatos no están dispuestos a dejar de luchar por mejorar sus condiciones. Por este motivo, no sólo denuncian las deficiencias en materia de uniformidad, sino que también informan de una falta de higiene en los nuevos vehículos de 'leasing' contratados hace pocos meses por la corporación. «Los coches siempre están en circulación porque los cogen los agentes del turno de mañana, de la tarde y de la noche. Por fuera se limpian, poco, pero lo hacen, pero por dentro llevan demasiado tiempo sin limpiarlos y esto ha generado la acumulación de suciedad, basura y han aparecido algunos olores muy desagradables», explican desde CSIT UP.
De todos modos, la vestimenta y los medios de transporte no son las únicas deficiencias denunciadas por los agentes del cuerpo de seguridad local. La situación de los inmuebles es otra de las razones que han despertado el malestar entre los policías. Los edificios de las unidades -cada vez más viejos y obsoletos- sufren goteras e inundaciones cada vez que un temporal de lluvias arrecia la capital. Ante la ausencia de precipitaciones, son los sistemas de climatización los protagonistas de los lamentos. «Hemos recibido llamadas de agentes que afirman que en sus unidades una gran multitud de compañeros han sufrido algún tipo de afección respiratoria en un corto espacio de tiempo. Se supone que los filtros del aire deben de ser limpiados periódicamente, pero la realidad es que la suciedad se acumula en ellos y han de ser los propios policías los que tienen que hacer estas labores», afirman desde CSIT UP.
Uniformes de gala para todos los policías municipales
Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid estudia desde el pasado mes de noviembre la compra de uniformes de gala para todos los agentes de la Policía Municipal de Madrid. A día de hoy, esta exclusiva uniformidad solo es para los policías con un rango superior al de sargento -unos 700 agentes- y el consistorio madrileño planea aumentar esta cifra y comprar cerca de 5.500 nuevos uniformes de gala para vestir así al resto del cuerpo de seguridad local. El coste rondaría los 250 euros por cada uniforme, es decir casi un millón y medio de euros en uniformes de gala.
De sargento a suboficial, la vestimenta de fiesta incluye pantalón y chaqueta azul, mientras que en la escala de mando (de oficial al inspector jefe) se caracteriza por una guerrera blanca con botones dorados. El resto de agentes cuando acuden a algún acto oficial, lo hacen con el uniforme de servicio. En este asunto, los sindicatos y las asociaciones policiales se encuentran enfrentados. CSIT UP y APMU son favorables a que al final el Ayuntamiento de Madrid termine por concretar esta compra, de hecho, la idea surgió desde APMU: “Lo pedimos hace tiempo, porque consideramos que es una mejora de la imagen del cuerpo. Quedaba muy mal ir a un acto como la fiesta del 2 de mayo o un funeral e ir con el uniforme de diario. La Policía Nacional o la Guardia Civil lo tienen y se lo entregan desde que terminan la academia”.
Por su parte, el sindicato mayoritario dentro del cuerpo CPPM y APMU se muestran contrarios a la idea porque lo ven un gasto innecesario. “Es un dinero procedente del ciudadano. Nos parece absurdo cuando todavía falta ropa del nuevo uniforme. Hay compañeros a los que les faltan pantalones o polos”, afirmó hace menos de una semana el secretario general de CPPM Francisco Torres.
Carlos Lospitao