Los jueces de la Audiencia Nacional Concepción Espejel y Enrique López han rechazado apartarse del tribunal que juzgará la 'caja B' del Partido Popular (PP), al considerar que no tienen una relación de «amistad íntima» con los acusados ni «interés directo» en el procedimiento.
Los magistrados exponen en sendos escritos los mismos argumentos que les llevaron a rechazar las recusaciones a las que se enfrentan como miembros del tribunal que juzgará la primera época de actividades de la red Gürtel, que se desarrolló entre los años 1999 y 2005.
López ha presentado un escrito de seis folios en el que defiende que no concurre «ninguna de las causas legales de abstención» establecidas por la ley para apartarse del procedimiento, al no tener «interés alguno, ni directo, ni indirecto, ni cercano, ni remoto» en el mismo.
El magistrado, que fue miembro del Tribunal Constitucional (TC) a propuesta del Gobierno del PP, rechaza albergar «algún tipo de prejuicio, inclinación o predisposición personal» más allá de la obligación que, como «profesional», dice tener para «asumir y resolver» aquellos asuntos que por normas de reparto le sean «encomendados».
En relación con la decisión de otorgar al juez Pablo Ruz la competencia para instruir el 'caso Bárcenas' en detrimento de su compañero Javier Gómez Bermúdez, que Izquierda Unida (IU) invocó como motivo de recusación, el magistrado indica que su participación se limitó a intervenir en la deliberación del tribunal. López y otros dos magistrados acordaron en marzo de 2013 suspender la declaración de Bárcenas que Gómez Bermúdez pretendía celebrar.
«Todo el mundo me llama Concha»
Espejel, que reproduce íntegramente el escrito que envió a la Sala de lo Penal en relación con el caso Gürtel, explica que no tiene ni ha tenido nunca «relación alguna» con el extesorero del Partido Popular (PP) Luis Bárcenas, al que «no conoce personalmente».
Añade que, si éste participó en la votación del Senado en que fue nombrada vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), como recordó la Fiscalía Anticorrupción, la propuesta constituiría, en todo caso, «un acto del órgano y no de los senadores que en aquel momento lo integraban».
También defiende que la frase pronunciada por la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, durante un acto en el que fue condecorada («para todos es Concha y lo va a ser siempre») «no tiene trascendencia alguna», puesto que desde que se incorporó a la carrera judicial en 1983 todos sus compañeros le llaman coloquialmente Concha.
«Los que me conocen saben que siempre me he presentado como Concha y no sólo desde que ejerzo la Judicatura sino durante la etapa universitaria e incluso colegial. Desde que era niña todo el mundo me ha llamado así», sostiene Espejel para negar a continuación ninguna «familiaridad sobrevenida» con la número 2 del PP, con la que únicamente mantuvo «una cordial relación institucional» mientras fue presidenta de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
En la causa sobre la contabilidad B de los 'populares' la recusación de Espejel fue solicitada por Izquierda Unida (IU), el Observatori DESC y la Asociación de Abogados Demócratas por Europa (ADADE), que ejercen la acusación popular. A estos tres colectivos se sumó el PSOE en el caso de Enrique López.