En un comunicado, la asociación recuerda que España es uno de los tres países de la UE con menos mujeres en su tribunal supremo, «sólo superada en este lamentable ranking por Albania y Luxemburgo», y subraya la obligación, incluida en la última reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial, de elegir a una mujer si existe igualdad de méritos con un hombre.
En este caso solo podrá suceder en una de las tres plazas convocadas, ya que en las otras dos las ternas preseleccionadas están formadas exclusivamente por hombres, destacan las juezas.
La asociación insta al CGPJ a tomar sus decisiones «en base a criterios objetivos en la valoración de mérito» de los aspirantes y a evitar «decisiones arbitrarias que den prevalencia a los aspirantes varones, con méritos inferiores a los de las aspirantes mujeres en esta concreta convocatoria», sostiene.
La única mujer que ha superado la primera criba aspira a una plaza de la Sala de lo Social correspondiente al turno de especialistas: la magistrada del Tribunal Superior de Justicia de Madrid Ana María Orellana, que ostenta el número 2 del escalafón de especialistas.
Junto a ella se ha incluido en la terna al magistrado José Manuel González Viñas, número 1 del escalafón, y a Juan Molins García Atance, número 10, pero se ha dejado fuera a una aspirante procedente de la Audiencia Nacional y que ostenta el número 7 del escalafón, señala la asociación.
La otra plaza convocada para la Sala de lo Social, del turno de generalistas, la solicitaron 14 magistrados, dos de ellos mujeres, y la terna ha quedado formada por tres hombres.
También ha quedado la terna formada solo por hombres en el caso de la plaza que debe cubrirse en la Sala de lo Civil del turno de juristas, a la que se presentaron 15 aspirantes, tres de ellos mujeres.
Entre ellas había, destaca la asociación, una catedrática de Derecho Civil de la Universidad de Santiago de Compostela y vocal permanente de la Sección primera civil de la Comisión General de Codificación del Ministerio de Justicia, «entre otros muchos méritos y excelencias jurídicas y gubernativas».
En la actualidad sólo hay 14 entre los 80 magistrados del Tribunal Supremo.
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