El exministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha declarado este jueves de forma voluntaria ante el Tribunal Supremo, donde negó cualquier implicación en el cobro de comisiones en el ‘Caso Koldo’. Tras más de tres horas de comparecencia, el político aseguró ante los medios que “no ha dejado nada en el tintero”.
“Llevaba meses intentando declarar, y finalmente se me ha dado esta oportunidad, por lo que estoy muy agradecido. Ha sido una sesión extensa, pero he aportado las aclaraciones necesarias y, por iniciativa propia, he comprometido la entrega oficial de toda la documentación que respalda lo que he explicado”, afirmó Ábalos a su salida del tribunal.
Según fuentes presentes durante su declaración, el exministro ha negado haber recibido comisiones y ha evitado incriminar a su exasesor, Koldo García, o a otras figuras de su entorno. Las mismas fuentes han confirmado que Ábalos no señaló a superiores ni realizó transacciones que pudieran comprometer a terceros.
Ábalos está siendo investigado en el marco de una presunta trama relacionada con la adquisición de material sanitario durante la pandemia, en 2020. Los delitos que se investigan son presunto tráfico de influencias, malversación, cohecho y pertenencia a organización criminal. El exministro llegó al tribunal a primera hora de la mañana en taxi, acompañado por su abogado, y abandonó la sede judicial al mediodía tras responder a todas las preguntas planteadas, incluida la de la acusación popular del Partido Popular, única autorizada a estar presente en la Sala.
Restricciones en la comparecencia
Como era de esperar, la jornada no ha estado exenta de polémica. El magistrado encargado del caso prohibió el acceso a otras seis acusaciones populares personadas, permitiendo únicamente la participación del PP. Esta decisión ha generado críticas, contribuyendo a aumentar la expectativa mediática que ha rodeado la llegada del exministro al Tribunal Supremo, donde un amplio despliegue de seguridad custodiaba el acceso.
Ábalos también respondió sobre su presunto “papel principal” en la adjudicación de contratos públicos relacionados con mascarillas y sobre las acusaciones lanzadas por Víctor de Aldama, señalado como intermediario en la trama.
Defensa de la presunción de inocencia
El ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, también abordó el caso en una entrevista en Onda Cero, defendiendo la presunción de inocencia de Ábalos. Sin embargo, evitó pronunciarse sobre una posible reincorporación del exministro al PSOE en caso de demostrar su inocencia.
“Es un supuesto. Lo importante es esperar a que la investigación concluya. Lo cierto es que, cuando se produjeron las detenciones pertinentes, el Partido Socialista actuó con rapidez”, explicó Torres. Además, criticó que el Partido Popular “da por buenas” las declaraciones de De Aldama, quien en ocasiones anteriores ha rectificado sus propias afirmaciones.
Acusaciones cruzadas entre PP y PSOE
Desde el PP, su secretaria general, Cuca Gamarra, afirmó que Pedro Sánchez conocía la situación cuando cesó a Ábalos en 2021, insinuando que el presidente quiso ocultar el caso con su destitución. “Sánchez sabía absolutamente todo y decidió tapar la corrupción dentro de su Gobierno con el cese de Ábalos”, afirmó Gamarra.
En la misma línea se ha expresado el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, quien ha insistido en que Sánchez tenía información que motivó el cese de su entonces ministro. “Todavía no sabemos qué llevó al presidente del Gobierno a cesar a Ábalos. Todo apunta a que tenía conocimiento de muchas cosas que prefirió ocultar”, ha advertido.
El futuro de Ábalos, en el aire
José Luis Ábalos confía en que la documentación que ha prometido aportar respalde su inocencia y despeje las dudas que pesan sobre su gestión como ministro.