La decana de los corresponsales en la Casa Blanca, la veterana Helen Thomas, anunció este lunes repentinamente su jubilación, diez días después de haber hecho unos comentarios contra los judíos que el Gobierno estadounidense ha considerado ofensivos y «reprochables». La dimisión, como indica un comunicado distribuido por el grupo de comunicación Hearst, del que Thomas es columnista, tiene efecto inmediato.
El anuncio se produce después de que la Casa Blanca criticara públicamente a la veterana reportera, de 89 años y conocida por sus punzantes preguntas en las ruedas de prensa diarias del portavoz presidencial. El portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, consideró hoy las declaraciones que hizo Thomas como «ofensivas y reprochables».
El 27 de mayo, Thomas, de origen libanés, hizo unos comentarios en un vídeo en los que afirmaba que los judíos debían «irse cuanto antes de Palestina» y les invitaba a regresar a Alemania, Polonia o Ucrania. Esas declaraciones se difundieron rápidamente por Internet y valieron numerosas críticas a la columnista, tanto de políticos como del propio cuerpo de corresponsales acreditados ante la Casa Blanca.
El asiento de honor de Thomas, en peligro
La Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca emitió también un comunicado en el que califica los comentarios de la periodista, que ha cubierto la gestión de todos los presidentes estadounidenses desde John F. Kennedy, como «indefendibles».
«Muchos en nuestra profesión que hemos conocido a Helen durante años nos hemos entristecido por sus comentarios, especialmente desafortunados a la luz de su papel como pionera en la cobertura de la Casa Blanca, indica el comunicado de la junta directiva de la asociación.
La junta directiva tenía previsto celebrar el jueves una reunión extraordinaria para decidir si retiraba a Thomas el asiento de honor con su nombre que se le guarda en la primera fila de la sala de prensa en la Casa Blanca.
La semana pasada, Thomas escribió en su página de internet que lamentaba «profundamente» los comentarios que hizo «acerca de los israelíes y los palestinos».
Ese comentario, indicó, «no refleja mi creencia de corazón de que la paz llegará a Oriente Próximo sólo cuando todas partes reconozcan la necesidad del respeto mutuo y la tolerancia. Ojalá ese día llegue pronto».