La Comisión Ballenera Internacional (CBI) aplazó hoy hasta el próximo año la decisión sobre un posible levantamiento de la moratoria a la caza comercial de ballenas ante la falta de consenso expresada por los países miembros.
La decisión fue anunciada por el presidente en funciones de la CBI, Anthony Liverpool, tras escuchar las opiniones de las distintas delegaciones nacionales, que solicitaron un periodo de reflexión que dé tiempo a reconsiderar las posiciones.
«Dejamos este punto de la agenda abierto para poder volver el próximo año con nuevas ideas y propuestas, indicó Liverpool ante los 88 países miembros de la comisión, que celebra hasta el próximo viernes su sexagésimo segunda reunión anual en la localidad marroquí de Agadir.
Sobre la mesa de negociaciones estaba la propuesta de consenso presentada el pasado abril por la presidencia y la vicepresidencia, en la que, entre otros puntos, durante la próxima década se mantenía la moratoria pero se limitaba la caza a los países que actualmente capturan «con unos topes considerablemente inferiores».
Según el delegado de Nueva Zelanda, Geoffrey Palmer, se afrontaba «una situación en que ninguna nación está satisfecha con el resultado de las negociaciones, por lo que «la mejor solución es tomar esa pausa y retomar las discusiones el próximo año».
«Estamos profundamente decepcionados con que los gobiernos aquí presentes, después de más de tres años de intenso trabajo, no hayan podido alcanzar una solución que beneficie a la conservación de las ballenas, indicó la directora de política internacional del grupo medioambiental PEW, Susan Lieberman.
A su juicio, «el mantenimiento del bloqueo entre los países pro y antiballeneros puede que mantenga la moratoria internacional sobre el papel, pero posibilita que la caza fuera del control de la CBI por parte de Japón, Islandia y Noruega continúe».