El presidente Obama ha asegurado este jueves durante un discurso que el Congreso debe crear una reforma que legalice a los inmigrantes sin papeles. Hasta el momento se prevé que en EEUU haya más de once millones de extranjeros sin papeles.
El presidente estadounidense ha acusado de tal situación a los intereses partidistas sobre este tema que enfrentan a republicanos y demócratas en el Congreso.
El tema de la inmigración, y sobre todo con la reciente ‘ley de Arizona’, está en la olla caliente de EEUU. Por eso, Obama, y ante la cercana fecha del mes de noviembre cuando se cumple la mitas de su legislatura, ha querido tomar esta decisión, quizá dicen los expertos, para atraer el apoyo del público hispano.
Ya en su momento el ex presidente George Bush y el senador Ted Kennedy defendieron esta idea, aunque visto está que sin llegar a nada. Ahora Obama pide al Congreso que esos inmigrantes ilegales deben registrarse para poder pagar impuestos o simplemente, conseguir la ciudadanía.