El alcalde de la localidad alemana de Duisburgo, Adolf Sauerland, ha denunciado que desconocidos han puesto precio a su cabeza, tras la avalancha humana registrada el pasado 24 de julio, que causó 21 muertos y 500 heridos, durante el festival de música tecno Loveparade.
«Una persona ha llamado y contado que le han pagado 5.000 euros por matarme, afirma Sauerland en una entrevista que publica hoy el rotativo «Bild, donde revela que, debido a las múltiples amenazas, cuenta con escolta policial permanente, mientras su familia ha abandonado preventivamente la ciudad.
Asimismo Sauerland, al que muchos responsabilizan de la catástrofe, señala que en otras llamadas «han amenazado con volar por los aires un jardín de infancia si no presento mi dimisión». «En las dos últimas semanas me he retirado conscientemente de la vida pública. Trabajo, pero procuro evitar las citas multitudinarias, comenta el alcalde de la ciudad, quien insiste en que no reflexionará sobre su posible dimisión hasta que no se aclaren las responsabilidades sobre el siniestro.
Las autoridades de Duisburgo, los organizadores de la Loveparade y la policía eluden hasta ahora asumir la responsabilidad de la catástrofe, que se achacan unos a otros, a la espera de los resultados de la investigación sobre el caso. Mientras tanto, la fiscalía de Duisburgo ha recibido ya más de 200 denuncias contra los presuntos responsables de la tragedia de la «Loveparade, mientras el equipo de investigación aumentó de 63 a 83 efectivos ante el volumen de documentación que deberán analizar para esclarecer lo ocurrido.
Según informaron fuentes de la fiscalía, hasta el momento se han presentado 220 denuncias, con acusaciones dirigidas «a desconocidos» por presunto «homicidio por imprudencia». Los funcionarios deben analizar más de 900 horas de imágenes de vídeo y unos 1.000 informes, amén de millones de datos informáticos, para esclarecer las circunstancias que precipitaron la tragedia en la mayor fiesta de música tecno del mundo.