El ministro de Inmigración francés, Eric Besson, y el secretario de Estado para Asuntos Europeos, Pierre Lellouche, tendrán que explicar este martes en Bruselas la polémica decisión de expulsar a 700 rumanos de etnia gitana que viven en campamentos en Francia.
A las 14:30 horas serán recibidos por la vicepresidenta de la Comisión Europea y comisaria de Justicia, Viviane Reding, y por Cecilia Malmström, comisaria de Interior.
La reunión se celebra un día antes de que Reding presente al Colegio de Comisarios un informe sobre la decisión que ha tomado Francia de expulsar a este colectivo. Así, Bruselas decidirá si iniciar o no un procedimiento contra Francia al considerar que no ha respetado las normas europeas en materia de libertad de movimiento y otras relacionadas con los derechos fundamentales.
El primer ministro François Fillon y el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, acordaron por teléfono la reunión tras ver la necesidad de una discusión sobre el tema. Fillon asegura que las medidas tomadas no se enfrentan a la ley.
Por otro lado, el Ministerio de Inmigración galo está interesado en reunirse con varios estados miembros, entre ellos Italia y España, para abordar el asunto de la inmigración irregular. Esta reunión será el próximo lunes 6 de septiembre.