Los incidentes registrados este verano en la frontera de Melilla con Marruecos y la situación del Sáhara Occidental serán el telón de fondo de la reunión que mantendrán este lunes en Nueva York el presidente del Gobierno, Jose Luis Rodríguez Zapatero, y el monarca alauí, Mohamed VI.
El encuentro comenzó a prepararse hace varias semanas y desde el Ejecutivo insisten en que no está motivada por acontecimientos recientes, como la visita a Melilla del líder del PP, Mariano Rajoy.
Fuentes del Ejecutivo enmarcan la reunión de Zapatero y Mohamed VI dentro de la normalidad de las relaciones de dos países vecinos, que han decidido aprovechar que ambos mandatarios coinciden en Nueva York con motivo de la cumbre de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y el inicio de la Asamblea General de Naciones Unidas.
Su último encuentro tuvo lugar hace ya más de dos años en la localidad marroquí de Oujda y coincidieron entonces en que Ceuta y Melilla, ciudades ocupadas para las autoridades marroquíes, no deben empañar las «excelentes» relaciones bilaterales.
Con ese mismo espíritu afronta el Gobierno esta nueva reunión, en la que previsiblemente se abordará también el plan de autonomía para el Sáhara que defiende Mohamed VI.
El Ejecutivo mantiene su apuesta por una solución justa, duradera y aceptable por ambas partes, pero advierte a los saharauis de que no será realista un plan que no cuente con el apoyo de Rabat.
La entrevista tendrá lugar después de que Zapatero intervenga en la Reunión de Alto Nivel sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio, donde ratificará el compromiso de España en la lucha contra el hambre y la pobreza, a pesar de los recortes por la crisis.
Desde 2004, la ayuda oficial al desarrollo española ha pasado de 1.985 millones de euros a 4.734 millones, hasta situarse en el 0,46 del PIB, pero el plan de ajuste ha incluido la primera rebaja de estos fondos -300 millones este año y 500 en 2011-.
Según fuentes del Ejecutivo, las ayudas a organismos multilaterales, partida que había experimentado uno de los mayores crecimientos en los últimos años, descenderá entre un 6 y un 7 por ciento en los presupuestos del año que viene.
En este contexto, se descarta que Zapatero vaya a anunciar ante Naciones Unidas nuevos compromisos económicos, pero sí podría poner sobre la mesa mecanismos novedosos de financiación de proyectos.
Además de la entrevista con Mohamed VI, este lunes tiene previsto reunirse también en el marco de Naciones Unidas con el presidente israelí, Simon Peres, y con el presidente de Filipinas, Benigno Aquino.
Su segunda jornada en Nueva York tendrá un carácter marcadamente económico y, como hizo en su reciente viaje a Shanghái y Tokio, se empleará en vender la marca España y defender la fortaleza de la economía.
A primera hora lo hará ante algunos de los principales inversores institucionales de Estados Unidos, una reunión que ha organizado el Tesoro y a la que asistirán importantes bancos, aseguradoras y fondos de inversión como Citigroup, Soros, Blackrock, Morgan Stanley o Goldman Sachs.
Después se reunirá con los miembros del consejo editorial del periódico Wall Street Journal y pronunciará una conferencia en la Universidad de Columbia, en la que participarán también el Nobel de Economía Joseph Stiglitz y Jeffry Sachs, asesor especial del secretario general de la ONU para los Objetivos del Milenio.
Junto a Zapatero, estarán en Nueva York con agendas paralelas el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos; la titular de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Elena Espinosa; y la ministra de Igualdad, Bibiana Aído.