Nueve soldados de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) murieron este martes al estrellarse su helicóptero en el sur de Afganistán, afirmó la organización, que informó además de la muerte de 14 insurgentes en un bombardeo.
La ISAF no precisó el punto exacto en el que se estrelló el aparato, aunque indicó que no hay «noticias sobre fuego enemigo en la zona, y anunció la apertura de una investigación para determinar la causa del suceso.
Según el comunicado militar, otros dos de sus soldados, un militar afgano y un civil estadounidense resultaron heridos en el accidente, y fueron transportados a uno de sus centros médicos para recibir tratamiento.
En otra nota de prensa difundida, la ISAF informó además de la muerte de 14 supuestos insurgentes en un bombardeo registrado en el distrito de Nad Ali, de la conflictiva provincia sureña de Helmand, tras un ataque talibán contra una patrulla.
El suceso tuvo lugar este lunes, cuando un grupo de insurgentes emboscados en una arboleda atacaron a una patrulla formada por soldados afganos y extranjeros, que se defendieron y pidieron apoyo aéreo.
«Catorce insurgentes murieron y ninguno resultó herido. Las informaciones operativas iniciales mantienen que no había civiles, afirmó en el comunicado la organización. Helmand es una de las provincias con más actividad y presencia de los talibanes.
Este lunes, la ISAF anunció que tropas estadounidenses asumirían el control de las operaciones en el distrito de Sangin, un centro de producción opiáceo donde los combates son constantes, en sustitución de las tropas británicas presentes en esa zona.