Ocho policías afganos han muerto y tres más resultaron heridos en un ataque insurgente en la conflictiva provincia de Helmand (sur de Afganistán), señaló una fuente oficial, que informó de la muerte de varios insurgentes.
El ataque ocurrió en el distrito de Gereshk, cuando un grupo de insurgentes asaltaron un puesto policial, explicó el portavoz del gobernador provincial, Daud Ahmadi.
Según el portavoz, en el enfrentamiento murieron «varios» de los atacantes. Un portavoz talibán, Mohamed Yousuf Ahmadi, atribuyó a sus hombres la autoría del ataque, en el que, según dijo, murieron 16 agentes y dos talibanes.
Este domingo, la Policía informó de que dos civiles murieron en una explosión cerca de un puesto de control policial en la ciudad de Kandahar, capital de la colindante provincia homónima, donde también se produjo un ataque con misiles contra la prisión de la ciudad, que no causó daños.
Los talibanes protagonizan frecuentes ataques contra las tropas extranjeras y afganas en todo el territorio, especialmente en el cinturón suroriental del país, donde predomina la etnia pastún, su principal caladero ideológico.
A principios de este mes, la fuerza aliada inició una ofensiva en los distritos que circundan la capital de la provincia de Kandahar, bastión de los talibanes en Afganistán.
La operación, bautizada como «Golpe de Dragón», comenzó tras varios meses de demora debido a las dificultades bélicas sufridas en la propia Helmand, donde comenzó en febrero otra ofensiva.