Miles de iraquíes han salido a las calles en distintas ciudades del país para participar en las manifestaciones convocadas este viernes para protestar por el empeoramiento de los servicios básicos, el paro y la corrupción. En Bagdad, miles de personas se dirigen a pie a la céntrica plaza de Tahrir para participar en el denominado «Viernes de la dignidad y de los desafíos» para pedir reformas políticas y económicas.
Muchos llevan banderas iraquíes y pancartas con mensajes como «no a la corrupción, «no al paro, sí a las oportunidades de trabajo para los parados», «queremos reformas del régimen» y «el petróleo del pueblo no es para el pueblo», según pudo constatar Efe.
Aunque los manifestantes se dirigen a Tahrir, los responsables de la seguridad en la capital les han solicitado que se limiten a protestar en las zonas marcadas por las autoridades: la plaza de Firdús para los residentes en el área de Rusafa, en el este, y la vecina plaza de Al Zaura para los vecinos del Karj, en el oeste. La plaza de Tahrir se encuentra entre la de Firdús y Al Zaura.
Efectivos de seguridad
Además, se ha pedido a los manifestantes que se alejen de las instituciones gubernamentales, que eviten los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad y que denuncien a sospechosos. Los efectivos de seguridad han cerrado los puentes de Al Yumhuriya y Al Sank con bloques de cemento para impedir la llegada de personas a la fortificada Zona Verde, también en el centro de Bagdad y sede del Gobierno, Parlamento y de varias embajadas.
A parte de en la capital, hay manifestaciones convocadas en Basora, en el sur de Irak, y en las provincias septentrionales de Salahedín, Nínive y en el norte de Kirkuk, entre otras. Las autoridades iraquíes impusieron ayer un toque de queda para vehículos o personas en varias ciudades y zonas del país por la convocatoria de protestas políticas de hoy.
El Comando de Operaciones de Bagdad anunció la prohibición de la circulación de vehículos, incluso las bicicletas, a partir de la pasada medianoche «y hasta nuevo aviso». El viernes pasado, una docena de personas murió y más de cien resultaron heridas durante manifestaciones que pedían una mayor atención social y medidas para acabar con la corrupción.
Redacción