Un seísmo de 6,3 grados en la escala abierta de Richter se produjo este martes en la costa de Fukushima (noreste de Japón), provincia en la que se encuentra la central nuclear de la que se han confirmado fugas radiactivas. La Agencia Meteorológica nipona informó de que el seísmo sucedió a las 18.50 hora local (9.50 GMT) y tuvo su epicentro en la costa a diez kilómetros de profundidad.
En Fukushima se encuentra la central nuclear donde se han detectado fugas radiactivas, que han llevado a ampliar el perímetro de seguridad de 20 a 30 kilómetros alrededor de la central. Este seísmo en Fukushima ha sido el más fuerte en lo que va de día, con una intensidad 3 en la escala japonesa de 7, que se centra en el alcance del temblor.
Son ya más de 200 las réplicas que han sucedido al grave terremoto de 9 grados que se produjo el viernes en la zona nordeste de Japón, causando casi 6.500 muertos o desaparecidos, según el último cómputo oficial.
Alerta nuclear
Las autoridades de Japón advirtieron este martes de un posible aumento de la radiación tras un incendio y una explosión en la central nuclear de Fukushima, en torno a la cual se ha declarado una zona de exclusión aérea de 30 kilómetros. El país, conmocionado aún por el devastador seísmo del día 11, amaneció con la noticia de una nueva explosión en la planta nuclear de Fukushima por acumulación de hidrógeno en el edificio del reactor número 2, tal y como ya había ocurrido con los reactores 1 y 3.
El estallido tuvo lugar a las 06.10 hora local (21.10 GMT del lunes), poco después de que el Gobierno admitiera que ese reactor continuaba inestable. Tras la explosión, los niveles de radiación superaron el límite legal hasta llegar durante un instante a los 8.127 microsievert, ocho veces por encima del tope recomendado para la salud, según la agencia local Kyodo.
Apenas tres horas después, un incendio causado a su vez por combustión de hidrógeno afectó al edificio que alberga el reactor 4 de la planta de Fukushima, inactivo desde antes que ocurriera el devastador seísmo de 9 grados Richter. En la planta nuclear número 1 de Fukushima sólo se encuentran 50 trabajadores, después de que el grueso de empleados, unos 800, hayan sido evacuados, mientras el Gobierno ha pedido a los residentes en un perímetro de entre 20 y 30 kilómetros alrededor de la central que permanezcan en sus casas y cierren las ventanas.
Zona de exclusión aérea
También se ha decretado una zona de exclusión aérea en el radio de 30 kilómetros alrededor de la planta, operativa desde 1971, mientras los niveles de radiación han sobrepasado 400 veces el nivel considerado seguro para las personas alrededor del reactor número 3. Los niveles de radiación han aumentado en amplias zonas, incluida Tokio. «El peligro de más fugas de radiación está creciendo», advirtió el primer ministro, Naoto Kan, al tiempo que instó a la población a «actuar con calma».
Según la agencia Kyodo, la radiación fue hasta 33 veces superior al límite legal en Utsunomiya, capital de la provincia de Tochigi, al norte de Tokio, y también se midió radiación nueve veces por encima de lo normal en Kanagawa, al sur de la ciudad. En la capital también se elevaron los niveles de radiación y se detectaron pequeñas cantidades de sustancias radiactivas como cesio, según el Gobierno Metropolitano, citado por la agencia Kyoo.
La televisión local NHK señaló que la radiación en Tokio superaba en cerca de 20 veces el nivel ordinario, aunque según las autoridades locales esto no implica riesgos inmediatos para la salud. También en otras provincias, como Kanagawa y Saitama, la radiación alcanzó entre 10 y 40 veces su nivel habitual.
Los ciudadanos de estas zonas, especialmente de las más cercanas a Fukushima, donde hay cerca de 200.000 evacuados, siguen con preocupación las noticias sobre la central. Mientras tanto, continúan las labores de búsqueda de supervivientes del terremoto y el devastador tsunami del viernes, que ha causado al menos 2.478 muertos y 3.611 desaparecidos, según el último recuento oficial de la policía.
Se teme, sin embargo, que esta cifra aumente, ya que las autoridades locales de provincias las de Miyagi e Iwate, dos de las más afectadas por el tsunami, hablan de miles de desaparecidos. La inquietud por la situación en la central de Fukushima hizo que la Bolsa de Tokio se desplomara hoy más de un 10 por ciento, hasta cerrar en poco más de 8.600 puntos, su nivel más bajo desde abril de 2009.
Redacción