Ocho personas murieron y otras siete resultaron heridas, entre ellas varias mujeres y niños, en una nueva serie de bombardeos lanzados por las fuerzas leales a Muamar al Gadafi contra la ciudad libia de Misrata, informó el canal de televisión Al Yazira.
Un residente en la ciudad, sitiada desde hace casi dos meses por los gadafistas, indicó al canal catarí que los nuevos ataques comenzaron anoche y se intensificaron esta mañana.
Las fuerzas gubernamentales utilizaron de nuevo misiles Grad y obuses de artillería de diferentes calibres para atacar numerosas zonas residenciales de la ciudad, según la fuente.
Los ocho muertos eran todos civiles y murieron en el barrio de Ksar Ahmed, cerca del puerto. La cadena catarí ha difundido imágenes de cuerpos cubiertos con mantas y de los daños sufridos en casas y edificios de la ciudad.
Ayer, al amanecer, los gadafistas bombardearon Misrata durante tres horas ininterrumpidas, en un ataque en el que murieron 23 personas, cinco de ellas ciudadanos egipcios, además de causar decenas de heridos.
Un portavoz rebelde citado por la misma cadena advirtió de «una verdadera masacre» si la OTAN no intensifica su intervención en Misrata, la tercera ciudad del país y cercada por las fuerzas de Gadafi, que la bombardean casi a diario.
La ciudad, bajo control rebelde, se encuentra al borde de una catástrofe humanitaria y su situación empeora cada día, dada la falta de alimentos, los cortes de agua y luz y de los medios de comunicación.
Actualmente existen esfuerzos internacionales para llevar ayuda a esta ciudad, aunque el régimen libio amenazó a principios de semana con un «salvaje y violento» ataque en caso de que se enviase una misión humanitaria a Misrata.
Los intensos bombardeos de las últimas horas han impedido que se descargase la ayuda médica y los alimentos que se encuentran a bordo de barco fletado por la ONU que atracó ayer en el puerto de esa localidad, reveló hoy en Ginebra un portavoz de la Organización Internacional de las Migraciones.