Parece la teoría del huevo y la gallina, un bebé con dos cabezas o dos bebés con un cuerpo. Por el momento los médicos del hospital de China que cuida al recién nacido se han decantado por decir que es un niño con dos cabezas.
Mientras se investiga qué hacer con la criatura, falta por conocer la postura de los padres. Se sabe que en un primer momento las ecografías indicaban que sólo se trataba de un embrión, pero en el mes de mayo se vio que tenía dos cabezas. La madre quiso abortar tras conocer la noticia, aunque los médicos le dijeron que ya era demasiado tarde.
Queda por conocer el destino del pequeño, por ahora lo poco que se sabe es que nació el 5 de mayo por cesárea y pesó 4,05 kilos.
Redacción