El presidente yemení, Alí Abdalá Saleh, abandonó este sábado su país en dirección a Arabia Saudí para recibir tratamiento de las heridas que sufrió este viernes en un atentado en Saná, informaron fuentes del Ministerio de Exteriores saudí.
A lo largo del día se ha especulado sobre un posible traslado de Saleh después de que cinco altos cargos yemeníes viajaran la pasada madrugada para recibir tratamiento de las heridas sufridas en el atentado.
Esos responsables son el primer ministro Alí Mohamed al Muyawar, los presidentes de la Cámara Alta y Baja del Parlamento, Yehia al Rai y Abdelaziz Abdelgani; el viceprimer ministro para Asuntos de Defensa y de Seguridad Rashad al Alemi y el secretario adjunto del gobernante Partido del Congreso General Popular, Sadeq Amin Abu Ras.
Este viernes, un asistente de la Presidencia aseguró que Saleh había resultado herido leve en la parte posterior de la cabeza por el impacto de un proyectil en una mezquita del complejo presidencial, donde se encontraba rezando junto a altos cargos yemeníes.
Sin embargo, existen dudas sobre su estado de salud, ya que en la grabación de audio que ayer se difundió podía apreciarse que le costaba respirar.
En ese ataque contra una mezquita en el interior del complejo presidencial, donde se encontraban rezando Saleh y otros responsables del régimen, murieron siete oficiales de los servicios de seguridad.
También resultaron heridos varios altos cargos, aparte de los que fueron traslados la pasada madrugada a Arabia Saudí.
Saleh acusó al líder tribal opositor Sadeq al Ahmar y a sus hermanos de estar detrás del atentado, en una grabación de audio difundida por la televisión estatal.
Al Ahmar negó este viernes en un comunicado cualquier implicación en el ataque.
Tribus rivales
Desde el pasado 23 de mayo, cuando el mandatario rechazó por tercera vez firmar un plan de los países del golfo Pérsico para una transferencia pacífica del poder, las fuerzas gubernamentales se enfrentan en la capital a los milicianos de Al Ahmar, jefe de la tribu Hashed y hombre fuerte de la oposición.
Una fuente cercana a Al Ahmar dijo este sábado por teléfono que diez de sus milicianos murieron este viernes y otros 35 resultaron heridos en enfrentamientos contra la policía y la Guardia Republicana en los alrededores de la vivienda de Hamid, hermano menor de Al Ahmar, en el barrio diplomático de Hedda.
Hamid es dirigente de la principal alianza de la oposición yemení, el Encuentro Compartido, y patrocinador de las protestas contra Saleh.
Por otro lado, en Taiz, en el sur, la Guardia Republicana desplegó este sábado sus tanques en los alrededores de uno de los palacios presidenciales en esta ciudad, mientras continúan los choques entre policías y hombres armados.
Los enfrentamientos se centraron en las afueras del edificio del Consejo Provincial en el barrio de Al Qahira en pleno centro de Taiz.
Además, decenas de hombres armados se han desplegado en torno a la plaza de la Libertad, ocupada el domingo pasado por las fuerzas de seguridad tras desalojar a miles de manifestantes antigubernamentales acampados allí.
Este viernes, los choques armados en Taiz causaron la muerte de cuatro policías y de dos hombres armados, mientras que sufrieron heridas 27 agentes y treinta manifestantes y milicianos opositores.