El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha aseverado que ganará «la batalla por la vida», aunque ha advertido a los venezolanos de que se encuentra solo en la primera etapa de esta victoria, indicando que «vendrán muchas otras», ya que se encuentra bajo «estricto tratamiento médico complementario», aunque no ha especificado en qué consiste.
«Les juro que ganaremos esta batalla. Esta batalla también la ganaremos y la ganaremos juntos. Ganaremos la batalla por la vida, por la patria, por la revolución», ha dicho un emocionado Chávez desde el balcón del palacio de Miraflores –sede presidencial– a las miles de personas que desde hacía horas aguardaban su comparecencia.
Pese a este optimismo, el mandatario ha expresado también sus cautelas, consciente de que el cáncer exige un proceso de recuperación lento. «Compatriotas, estoy seguro de que ustedes comprenden perfectamente las dificultades de esta batalla. Que nadie vaya a creer que ya mi presencia aquí significa que ganamos la batalla, no», ha advertido.
En este sentido, ha explicado que se encuentra inmerso en un «lento proceso de recuperación» que ha comenzado a dar sus resultados, por lo que se ha referido al mismo como «un milagro», aunque ha indicado que «hay que cuidarlo al extremo». «Hemos comenzado a remontar la cuesta. Hemos comenzado a vencer el mal», ha señalado.
Así, ha revelado que sigue «paso a paso» un «estricto tratamiento médico complementario», del que ya ha superado la primera etapa. «Lo hemos logrado, ahora vendrá una segunda y una tercera etapa de tratamiento que ya han comenzado, pero aquí estoy. Así como superamos la primera etapa del inicio del retorno, igual las que vengan, las venceremos», ha aseverado.
Además, ha relatado cómo ha sido su estancia en Cuba. Tras la primera operación, realizada el pasado 11 de junio, ha explicado que el ex presidente cubano Fidel Castro se comportó «prácticamente como el jefe de la legión de médicos venezolanos y cubanos que desde el primer día se dedicó con esmero a esta batalla».
Una vez más, ha indicado que fue Castro quien le comunicó la enfermedad que padecía, en una de sus visitas al hospital. «Desde allí comenzaron unas horas muy difíciles, sobre todo después de aquella tarde en la que yo ya estaba casi listo para regresar, después de la primera intervención, que pensamos no iba a tener consecuencias más graves», ha relatado.
La segunda operación, «más profunda», tuvo lugar el 20 de junio y duró «más de seis horas». «Fidel me visitó de nuevo para darme algunas pinceladas de los resultados. Comenzamos entonces a pensar y a hacer un gran esfuerzo, cuidando el más mínimo detalle para recuperar la fuerza mínima necesaria», ha indicado.
La «terapia intensiva» comenzó apenas cuatro días después, dando lugar a una «franca recuperación». En este tiempo, ha matizado, «nunca» perdió el contacto con el Gobierno, especialmente con el vicepresidente, Elías Jaua. «Ese día comenzó el retorno», ha aseverado.
Además, ha apuntado que el objetivo durante estos días de recuperación fue asistir a los actos de celebración del Bicentenario de la Independencia de Venezuela, que arrancan este martes. «Esta es la hora de la vida, es la hora de la patria, del pueblo venezolano y yo, como hijo de este pueblo, no podía faltar a la fiesta bicentenaria. No podía faltar entero, en cuerpo y alma», ha señalado, recibiendo un fuerte aplauso de la multitud.
Agradecimientos
Nada más salir al balcón y prácticamente a lo largo de todo el discurso, que ha durado unos 30 minutos, Chávez ha agradecido a los médicos que le han atendido, a Castro, al Gobierno y al pueblo venezolanos el apoyo que le han brindado en estos momentos.
«Mi agradecimiento personal a tantos y por tanto apoyo por tantas manifestaciones de amor, el amor es el mejor remedio para cualquier enfermedad. Gracias por hacerme llegar ese baño de amor tan especial no solo desde Venezuela sino desde muchos otros lugares del mundo», ha dicho.
«Le doy gracias a Dios, al Dios de mis padres, al Dios de mi pueblo, al Dios mío, al Dios de los otros. Le doy las gracias al manto de la Virgen, invocado por mi madre y por las madres de Venezuela. Le doy las gracias a los espíritus de la sabana. Le doy las gracias a la vida», ha proseguido.
De esta forma, el presidente, vestido con ropa militar y acompañado de sus hijas, ha finalizado su alocución. Es la primera que ofrece desde que regresara a Venezuela, en la madrugada del lunes (alrededor de las 14.00 horas de la tarde en España), procedente de Cuba, donde ha estado recuperándose de las dos operaciones a las que se sometió para extirpar un tumor cancerígeno.
Redacción