El Gobierno de Irak condenó este jueves los ataques perpetrados el miércoles por las milicias del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el sureste de Turquía, que causaron la muerte de 24 soldados turcos, y se mostró dispuesto a cooperar con el Gobierno de Ankara para garantizar la seguridad e impedir nuevos incidentes similares en el futuro.
«El Gobierno de Irak y el Gobierno Regional Kurdo se comprometen a mantener la seguridad en la frontera y la cooperación en materia de seguridad con el Gobierno turco a fin de evitar que se repitan actos como éste», declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
Las milicias del PKK atacaron este miércoles al menos siete posiciones militares en los distritos de Cukurca y Yuksekova, en la provincia de Hakkari, fronteriza con Irak. Tras los ataques, el Ejército turco lanzó una persecución «en caliente» que incluyó una operación aérea y terrestre contra las bases del PKK en el Kurdistán iraquí, en el norte.
Estrella Digital/Ep