Un tribunal de El Cairo ha condenado este jueves a ocho años de cárcel y a una multa de 2.180 millones de libras egipcias (272 millones de euros) a un antiguo ministro de la Vivienda, Ibrahim Soliman, por malversación de fondos públicos a través de dos acuerdos para el uso de terrenos del Estado.
Asimismo, el tribunal ha sentenciado ‘in absentia’ a Magdi Rasekh, el suegro de la hija mayor del expresidente Hosni Mubarak, Alaa Mubarak, a cinco años de prisión y a una multa de 2.340 millones de libras egipcias (292 millones de euros) en relación con uno de los dos acuerdos.
Los casos contra Soliman –ministro entre 1993 y 2005– y Rasekh fueron remitidos a la Fiscalía del Estado en mayo de 2011, tres meses después del derrocamiento popular de Mubarak.
Ambos casos están relacionados con la venta de tierras del Estado a empresarios por un valor menor al del mercado. Las multas servirán para compensar al Estado por sus pérdidas y no para recuperar las tierras, muchas de las cuales ya han sido explotadas en actividades inmobiliarias y han sido vendidas a otras personas.
Rasekh era el director de la empresa de desarrollo de desarrollo e inversión SODIC, hasta su dimisión, que se produjo el pasado año. Su nombre figura en la larga lista de personalidades que renunciaron de sus cargos en empresas inmobiliarias para distanciarse de Mubarak. Otros seis empresarios y empledos del Estado han sido condenados y multados por su mismo caso.