El director del comité parlamentario sobre Asuntos Exteriores de Rusia, Aleksei Pushkov, ha afirmado este lunes que el tribunal estadounidense que está juzgando al presunto traficante de armas ruso Viktor Bout, también conocido como el ‘Mercader de la muerte’, ha sentado un precedente con este caso y ha apuntado que Rusia no entregará a los ciudadanos estadounidenses a Washington como hasta ahora, sino que los juzgará en el país.
«Van a sentenciar a Bout a cadena perpetua. Es, por supuesto, ciudadano ruso. Estados Unidos está sentando un precedente», ha dicho Pushkov a través de Twitter. «Creo que juzgaremos a estadounidenses si cometen crímenes en nuestro país. A partir de ahora no están sujetos a extradición», ha manifestado en un segundo ‘twit’, según ha informado la cadena de televisión rusa RT.
Por su parte, la Embajada estadounidense en Rusia ha contestado a través de esta misma red social con tres ‘twits’. En el primero de ellos ha recordado que Bout todavía no ha sido sentenciado, mientras que en los otros dos ha dicho que el fiscal sólo ha recomendado que la sentencia sea aprobada por un juez independiente «tal y como el sistema judicial estadounidense funciona».
La fiscalía estadounidense pidió el viernes pasado al tribunal federal que se encarga de juzgar a Bout que sea sentenciado a cadena perpetua para que la pena sirva como ejemplo disuasorio a otros que intenten vender armas a grupos militantes. Este lunes, el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha solicitado una condena de 30 años de prisión, según ha informado su abogado, Albert Dayan.
Bout fue detenido en Tailandia en marzo de 2008 en el marco de una operación desarrollada por Estados Unidos en la que varios agentes de hicieron pasar por guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que querían comprar armamento.
Tras pasar dos años y medio encarcelado en Tailandia, en noviembre de 2010 fue extraditado a Estados Unidos. Un año después fue declarado culpable por conspirar para matar a ciudadanos y funcionarios estadounidenses, por apoyar a grupos terroristas y por adquirir y pretender usar misiles antiaéreos, cargos por los que podría ser condenado a 25 años de cárcel.
Entretanto, el traficante de armas está en la cárcel de Brooklyn, adonde fue trasladado el pasado mes de febrero, después de que la juez que preside el tribunal, Shira Scheindlin ordenara el fin de su confinamiento en solitario en el Correccional de Manhattan.
Por su parte, las autoridades rusas han cuestionado el veredicto y han asegurado que harán todo lo posible para que Bout regrese al país euroasiático.