El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el líder del Kadima, partido opositor, Shaul Mofaz, han llegado este martes a un acuerdo para formar un gobierno de unidad, cancelando así la convocatoria de elecciones anticipadas.
Según informa el diario ‘Haaretz’, en virtud de este acuerdo el Kadima se compromete a apoyar las políticas del Gobierno de Netanyahu en la Knesset (Parlamento) hasta el término de su mandato, en 2013.
A cambio, el Kadima formaría parte del Ejecutivo. En concreto, Mofaz, que fue nombrado líder del partido político hace dos semanas tras derrotar a Tzipi Livni en las elecciones primarias, sería nombrado viceprimer ministro y ministro sin cartera.
En una entrevista concedida a ‘Haaretz’ de cara a dichos comicios, Mofaz aseveró que, en caso de proclamarse vencedor, no se uniría a Netanyahu. «Bajo mi liderazgo, el Kadima seguirá en la oposición. El actual Gobierno representa todo lo que es erróneo en Israel», afirmó.
Además, a cambio del apoyo del Kadima, el primer ministro se comprometería a reemplazar la llamada Ley Tal, que permite a los judíos ultraortodoxos ausentarse del servicio militar, así como a reformar el sistema electoral.
El acuerdo llega horas después de que Netanyahu anunciara su intención de convocar elecciones generales para el próximo 4 de septiembre por la «inestabilidad» en la coalición de Gobierno al considerar que es un perjuicio para la seguridad, la economía y la sociedad israelíes.
La líder de Meretz, Zahava Gal-On, ha aseverado que el acuerdo es fruto de una «mega maniobra» del primer ministro para evitar los comicios y un «movimiento desesperado» del Kadima para evitar una crisis entre sus filas. «Es una vergüenza para el Parlamento y un terrible mensaje para el público», ha añadido.