La ciudad libanesa de Trípoli ha registrado nuevos enfrentamientos entre los residentes del barrio Bab al Tabbaneh, de mayoría suní, y los de Jabal Mohsen, de mayoría alauí y favorables al presidente sirio, Bashar al Assad, motivo por el que el Ejército ha amenazado con «una respuesta sin precedentes» contra todo aquel que viole la tregua vigente.
El motivo del tiroteo permanece sin esclarecer, ya que la cadena libanesa Al Jadid ha indicado que fueron residentes de Jabal Mohsen los que iniciaron el incidente, mientras que la cadena emiratí Al Arabiya ha dicho que los primeros disparos procedieron de Bab al Tabbaneh.
Las fuerzas del Ejército libanés dispararon contra las fuentes de los disparos en ambos barrios, aunque la agencia estatal NNA ha apuntado que no se apreció presencia de tiradores en Bab al Tabbaneh. Por otra parte, fuentes de Jabal Mohsen han dicho que hay órdenes «para no devolver fuego en caso de que disparen contra el barrio desde Bab al Tabbaneh».
En respuesta, el Ejército ha subrayado que «si la situación sigue así, habrá una respuesta sin precedentes (por parte de las Fuerzas Armadas) como nunca antes han visto ninguna de las dos partes». Los combates entre miembros de ambos barrios han dejado catorce muertos y más de 50 heridos desde el sábado.
Los enfrentamientos entre miembros de la secta alauí partidarios de Al Assad y hombres armados suníes estallaron en mayo en Trípoli tras la detención de Shadi al Mulawi, un dirigente islamista a quien las autoridades libanesas vincularon con una «organización terrorista» y el cual, según sus partidarios, fue detenido a causa de sus actividades de apoyo a refugiados sirios.
Los incidentes se extendieron a otras partes del país y llegaron a afectar la zona norte y la capital, Beirut, aunque disminuyeron tras la liberación de Al Mulawi.
Estrella Digital/EP