El exprimer ministro de Grecia George Papandreu, ha urgido a los griegos a que apuesten por un Gobierno «proeuropeo» como garante de la estabilidad nacional, en detrimento de las fuerzas políticas que abogan por contravenir las directrices de Bruselas.
En una entrevista concedida al diario británico ‘The Guardian’, Papandreu espera que «una victoria de los partidos proeuropeos pueda concluir en una coalición estable para después poder suavizar las medidas de austeridad». No obstante, ha reconocido que una prolongación en el tiempo del plan de rescate vendrá acompañada de más contrapartidas económicas.
En este sentido, Papandreu ha instado a la Unión Europea (UE) a que cambie el prisma a través del cual mira a Grecia. «Necesitamos certeza y un camino claro, lo que los griegos no podemos hacer solos», ha afirmado el exprimer ministro heleno. «Por eso, Europa ha de actuar con claridad», ha agregado.
Papandreu ha asegurado que las autoridades griegas han estado trabajando para «remendar el problema» económico y financiero que acucia el país, si bien ha puntualizado que esta «tarea de reparación tiene que finalizar».
A su vez, ha condenado la expansión de los «estereotipos simplistas» que han retratado a los griegos como a unos ciudadanos vagos y derrochadores cuando, ha recalcado, los problemas radican en la estructura del Estado y en la debilidad que emana una unión monetaria cuyo «entramado arquitectónico está incompleto».
«Es muy fácil decir que Grecia es el problema, pero hemos visto una y otra vez que hay un riesgo sistémico», ha argumentado Papandreu. «Ante lo que está haciendo frente Grecia, es con lo que otros países europeos tendrán que lidiar. Solo somos un espejo de los problemas que podrían ocurrir», ha sentenciado.
Papandreu ha aseverado que «no importa lo haga Grecia porque los mercados no cesarán hasta que Europa no atienda a sus propias contradicciones».
Sobre su papel como primer ministro en Grecia, Papandreu ha enfatizado en que su principal propósito era mantener al país «a flote» en el lado humanitario, a tenor de las críticas que ha recibido de amplios sectores políticos helenos que le tachaban de actuar conforme a los dictámenes de la UE. Existía «la voluntad» en Grecia de implementar un punto de inflexión como supuso el primer paquete de rescate ante la «incapacidad administrativa» de las autoridades de emprender un cambio por sí solo, ha indicado Papandreu.
Además, ha ratificado que tanto la canciller alemana, Angela Merkel, como el presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, eran conocedores «desde el verano» –y lo aceptaron– de sus planes de convocar un referéndum sobre el segundo plan de rescate acordado con Bruselas en octubre.