Los últimos observadores de la ONU en Siria cuya misión termina este domingo, 19 de agosto, han empezado a retirarse del país, según una portavoz de Naciones Unidas, Juliette Touma, citada por medios de comunicación internacionales.
Touma ha explicado que los miembros de la Misión de Supervisión de Naciones Unidas en Siria (UNSMIS) que continúan allí, alrededor de un centenar de personas, abandonarán el país en las próximas horas, según recoge la agencia de noticias rusa, RIA Novosti.
Creado por la aprobación el 21 de abril de la resolución 2043 de la ONU, UNSMIS contaba originalmente con 300 observadores militares no armados pero se redujo a la mitad a finales de julio. La misión se estableció para supervisar el alto el fuego entre el Gobierno y los opositores del presidente Bashar al Assad que entró en vigor el 12 de abril, sin embargo el recrudecimiento de la violencia han impedido su labor.
El 16 de agosto el Consejo de Seguridad de la ONU anunció el fin de la misión y el establecimiento de una oficina de enlace civil para mantener los esfuerzos de Naciones Unidas y la Liga Árabe para lograr una solución del conflicto.
Según las autoridades sirias el conflicto que afecta al país desde hace 17 meses ha causado cerca de 8.000 muertos. Por contra, las organizaciones no gubernamentales estiman que entre 17.000 y 20.000 personas han muerto en los enfrentamientos.