El primer ministro italiano, Mario Monti, ha dicho este lunes que preferiría no seguir como jefe de Gobierno tras las elecciones generales del próximo mes de abril, pese a las crecientes peticiones en este sentido. Monti fue nombrado al frente de un Gobierno de tecnócratas tras la dimisión del primer ministro Silvio Berlusconi en noviembre del año pasado en medio de la crisis financiera. El mandato de su Ejecutivo termina en marzo.
Monti ha respondido tajante: «no»
Preguntado en un acto organizado por el ‘Financial Times’ en Milán sobre si le gustaría seguir en el cargo, Monti ha respondido tajante: «no».
El pasado septiembre, el primer ministro había dicho que por responsabilidad hacia el país seguiría ejerciendo el cargo si las elecciones no ofrecieran un líder con una mayoría clara.
«Veo que mucha gente se imagina un escenario de este tipo», ha señalado hoy, en respuesta a una pregunta sobre si dirigía un nuevo Gobierno. «A algunos les gusta y a otros les disgusta. Yo no hago comentarios sobre ello», ha añadido.
El sector empresarial y muchos políticos respaldan un segundo mandato de Monti
Los últimos sondeos muestran que ningún partido o alianza de partidos conseguiría más del 32 por ciento de los votos si se celebrasen ahora las elecciones. El sector empresarial y muchos políticos respaldan un segundo mandato de Monti con el fin de asentar las reformas estructurales que su Gobierno ha puesto en marcha y mantener la confianza de los mercados en la economía italiana.
Preguntado sobre los mercados financieros, Monti ha dicho que la prima de riesgo italiana ha caído dramáticamente en el último año y podría seguir cayendo. «No veo en los fundamentos italianos ninguna razón por la que la prima debería ser superior a los 150 puntos básicos», ha afirmado.
Este lunes, los bonos italianos a diez años estaban en los 365 puntos con respecto al bono alemán a diez años, tras haber alcanzado el récord en la eurozona con 570 puntos el pasado diciembre.