El embajador Serbia ante la OTAN, Branislav Milinkovic, se ha suicidado anoche tras saltar al vacío desde un aparcamiento del aeropuerto de Bruselas sin que se conozcan los motivos de esta tragedia, según han informado los medios serbios y ha confirmado la Fiscalía belga.
Milinkovic era un veterano diplomático y abogado serbio, que ejercía desde 2009 de embajador extraordinario y plenipotenciario serbio ante la OTAN –organismo al que no pertenece Belgrado– y que había estado destinado en Bruselas desde 2004 como enviado especial del Ministerio de Exteriores serbio y montenegrino ante la Alianza.
La Fiscalía belga ha descartado abrir una investigación sobre el caso al tratarse «claramente de un suicidio», han confirmado a Europa Press fuentes fiscales belgas, que no han querido dar detalles del suceso por respeto a la familia del fallecido.
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha expresado su «profunda tristeza por la trágica muerte del embajador serbio», que era una figura «muy respetada» en la OTAN y a quien se echará «de menos», al tiempo que ha trasladado sus «condolencias» a su familia, según ha explicado la portavoz aliada, Carmen Romero.
Estrella Digital/EP