El Papa Francisco, hasta hace unas horas, cardenal Jorge Mario Bergoglio, tendrá que enfrentarse a partir de ahora a los retos que se presentan y que han quedado abiertos al fin del Pontificado de Benedicto XVI en la Iglesia católica, como la renovación de la Curia Romana, el caso ‘Vatileaks’, los casos de abusos sexuales, las finanzas del Vaticano, la Nueva Evangelización, el papel de la mujer en la Iglesia y el diálogo interreligioso.
Concretamente, el nuevo Pontífice habrá de llevar a cabo un cambio en la Curia, sobre todo, después del escándalo de la filtración de documentos privados del Papa, conocido como caso ‘Vatileaks’, por el que Benedicto XVI creó una comisión cardenalicia encabezada por el español Julián Herranz que elaboró un informe que precisamente se ha dejado reservado al nuevo Papa, ahora ya, Francisco.
Asimismo, deberá tomar las riendas de las finanzas vaticanas, aunque su predecesor ya le ha abierto el camino nombrando antes de que su renuncia se hiciera efectiva a un nuevo presidente del Instituto para las Obras de Religión (IOR), Ernest von Freyberg. Precisamente, durante las Congregaciones Generales previas al Cónclave, el cardenal Tarcisio Bertone, como presidente del Comité de Finanzas y vigilancia del IOR, presentó una breve relación sobre el proceso de transparencia ante el Moneyval.
Otro asunto que tendrá que atajar Francisco I será el de los casos de abusos sexuales a los que Benedicto XVI empezó a enfrentarse ya antes de ser elegido Papa, cuando era prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe. La aparición de víctimas de abusos por parte de sacerdotes ha obligado al Vaticano no solo a pedir perdón desde Irlanda hasta EE.UU. sino también a redactar unas líneas guía para explicar a todas las Conferencias Episcopales del mundo cómo deben actuar ante estos casos, empezando por informar a las autoridades y no proteger a los autores.
Además, Francisco tendrá por delante el desafío de la Nueva Evangelización en medio del Año de la Fe y ante la secularización en las sociedades occidentales. Así lo recordaba el relator general del Sínodo de los Obispos, el arzobispo de Washington, el cardenal Donald Werl durante la XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos que se celebró el pasado mes de octubre bajo el lema ‘La nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana’. «La secularización es como un ‘Tsunami’ que ataca principalmente al mundo occidental por lo que la Iglesia usará la Nueva Evangelización para contrarrestar sus efectos», apuntaba.
Por otro lado, el diálogo interreligioso también deberá centrar la atención del nuevo Pontífice en un mundo globalizado como el actual, así como otros temas que el Colegio Cardenalicio ha tratado en las Congregaciones Generales: la bioética, la justicia en el mundo, la colegialidad y la presencia de la mujer en la Iglesia, entre otros.