Los talibán paquistaníes han confirmado la muerte de su líder, Hakimulá Mehsud, abatido en un ataque de un avión no tripulado en la región de Waziristán del Norte, cerca de la frontera con Afganistán. La información, que había sido adelantada por fuentes de seguridad paquistaníes, ha sido admitida posteriormente por un portavoz insurgente en declaraciones a la agencia Reuters. El ministro del Interior, Nisar Ali Jan, ha dicho a una televisión paquistaní que no disponía de suficiente información para confirmar el fallecimiento de Mehsud.
El funeral en memoria del líder talibán se celebrará este sábado a las 15.00 (hora local) en Miranshá, según una fuente de los servicios de Inteligencia citada por Reuters. Mehsud perdió la vida después de que un supuesto ‘drone’ estadounidense bombardease un vehículo a bordo del cual viajaba un grupo de talibán. Los milicianos habían asistido a una reunión en una mezquita de la zona de Danda Darpa Jel, a cinco kilómetros de la capital de la región, Miranshá, han informado fuentes de la Inteligencia al periódico ‘Dawn’.
Además del líder talibán, también habría perdido la vida uno de sus principales lugartenientes, Tariq Mehsud, así como otras tres o cuatro personas más.
La muerte de Mehsud se ha producido un día después de que el primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, diese por abiertas las conversaciones de paz con los talibán. El ministro del Interior explicó este viernes, antes del ataque, que una delegación gubernamental tenía previsto desplazarse el sábado para comenzar las conversaciones.
En declaraciones posteriores a los periodistas, Nisar ha condenado el bombardeo y lo ha considerado un intento de Estados Unidos para sabotear el diálogo. El Ministerio de Exteriores ha hecho público un comunicado en el que ha recordado que «estos ataques suponen una violación de la soberanía y de la integridad territorial de Pakistán».
«Pakistán ha mantenido en reiteradas ocasiones que los ataques con ‘drones’ son contraproducentes, provocan la pérdida de vidas inocentes y tienen implicaciones en materia de Derechos Humanos», ha lamentado Exteriores en su nota, recogida por la cadena Geo TV. Para Islamabad, las acciones estadounidenses en al zona perjucian las relaciones «cordiales» entre los gobiernos y la «cooperación» para garantizar «la paz y la estabilidad en la región».
Negociaciones
El Gobierno de Pakistán ha estado intentando negociar un acuerdo de paz que ponga fin a años de conflicto, pero la organización terrorista vinculada con Al Qaeda había asegurado en un principio que no estaba dispuesta a iniciar ningún tipo de conversaciones.
Los talibán paquistaníes también habían afirmado que no entregarían sus armas y que no hablarían con el Gobierno hasta que el Ejército replegase sus fuerzas de las zonas fronterizas con Afganistán y todos sus prisioneros fuesen liberados.
Los talibán paquistaníes, cuyo objetivo principal es establecer un estado islámico en Pakistán, aglutinan a varias facciones que operan independientemente de sus aliados los talibán afganos.