Rusia y China han vetado este jueves la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que buscaba remitir al Tribunal Penal Internacional (TPI) la guerra civil en Siria para su investigación de los abusos cometidos durante la misma.
La propuesta, promovida por Francia y respaldada por decenas de países, recibió trece votos a favor y dos en contra, los de Moscú y Pekín, que tienen derecho de veto en el Consejo de Seguridad.