El Tribunal de la Magistratura de Jerusalén ha ordenado este domingo libertad condicional para el palestino-estadounidense Tarek Abú Judeir, de 15 años, linchado el jueves por policías israelíes y detenido sin cargos desde entonces.
El joven pasará nueve días en arresto domiciliario y se ha abierto una investigación por atentado contra la autoridad, según informa el diario israelí 'The Jerusalem Post'. La fianza impuesta, que no ha trascendido, habría sido abonada por el diputado árabe-israelí Ahmed Tibi.
Tarek Abú Judeir, nacido en Tampa (Florida, EEUU), donde reside, se encontraba de vacaciones junto a sus padres en Jerusalén Este para visitar a sus familiares.
El incidente ocurrió en la noche del pasado jueves en el barrio de Shufat de Jerusalén, cuando once palestinos fueron golpeados y detenidos. Según Addameer, el chico no recibió asistencia médica hasta las 1.20 horas (fue detenido en torno a las 20.00 horas), cuando fue ingresado en el Hospital Hadassa. Hasta entonces tampoco pudieron verle sus padres.
Las imágenes de la cara desfigurada del adolescente se han difundido por Internet, así como un vídeo grabado furtivamente en el que se puede ver a dos policías enmascarados golpeando a una persona que yace indefenso en el suelo, supuestamente Judair. El vídeo se puede ver en YouTube, pero la Policía israelí considera que está editado y lo califica de «sesgado».
El padre de Tarik, Salé Abú Judeir, ha lamentado lo ocurrido. «Cualquiera que vea el vídeo dirá 'este niño ha muerto' por cómo fue golpeado. Haya hecho mi hijo algo ilegal o no, ¿por qué le golpeáis así?», ha afirmado el padre del adolescente en declaraciones a 'The Jerusalem Post'.
Salé Abú Judeir ha explicado que su hijo paseaba por el barrio, habitualmente pacífico, cuando los policías, que estaban escondidos, saltaron sobre él.
Israel investigará lo ocurrido
Ya el sábado por la noche, el Ministerio de Justicia israelí anunció la apertura de una investigación sobre el incidente de Tarek Abú Judeir.
Tarek Abú Judeir es primo de Mohamed Abú Judeir, adolescente de 16 años que fue asesinado el pasado miércoles por israelíes en Jerusalén en lo que parece una venganza por el secuestro y asesinato de tres jóvenes israelíes cerca de Hebrón. La muerte de Mohamed Abú Judeir, quemado vivo, ha desatado una oleada de protestas palestinas.
Las tensiones entre israelíes y palestinos han crecido sustancialmente después de que tres jóvenes israelíes fuesen secuestrados el 12 de junio y, días después, fueran encontrados muertos en Cisjordania.