El Gobierno ha congelado en agosto las autorizaciones de venta de armas a Israel, una decisión que el Ejecutivo volverá a analizar en septiembre para decidir entonces si la prolonga en el tiempo, según han informado fuentes diplomáticas.
La decisión se tomó la semana pasada en una reunión de la Junta Interministerial reguladora del comercio exterior de material de defensa, que preside la Secretaría de Estado de Comercio, y en la que participan los ministerios de Asuntos Exteriores y de Defensa.
La paralización de las exportaciones, que no afecta a ninguna compraventa anterior a este mes de agosto, se ha tomado casi un mes después de que, el pasado 8 de julio, Israel comenzara el ataque militar sobre Gaza que ya ha causado la muerte de más de 1.800 palestinos.
Las citadas fuentes han precisado que la paralización de la venta de armas a Israel concitó un consenso mayoritario entre los diferentes departamentos ministeriales del Ejecutivo de Mariano Rajoy.
4,9 millones en ventas en 2013
España vendió el año pasado al Estado de Israel material de defensa por valor de casi 4,9 millones de euros, lo que supone en torno a un 87% más con respecto a las exportaciones de este material en 2012. Se trata de la mayor exportación de los últimos cinco años.
En concreto, el Gobierno autorizó, principalmente, la exportación de bombas, cohetes, torpedos, misiles, granadas o cargas de demolición.
Según figura en los informes de las estadísticas de exportación de material de defensa, otro material y productos y tecnologías de doble uso elaborados por la Secretaría de Estado de Comercio, el Ejército israelí fue en 2013 el receptor del 98,70% de dicho material de defensa, mientras que el 1,3% restante fue a parar al sector privado.
Así, el año pasado España exportó a Israel material clasificado como «bombas, torpedos, cohetes, misiles» en los citados informes por valor de 3,6 millones de euros, además de «vehículos terrenos», diseñados especialmente para uso militar, por un total de 986.937 euros.
España también exportó armas con cañón de ánima lisa con un calibre inferior a 20 milímetros, como pueden ser fusiles, revólveres, pistolas o ametralladoras, por valor de 134.744, y además sistemas de dirección de tiro, como pueden ser visores de armas o sistemas de vigilancia o rastreo, por 132.830 euros.