El Ejército ucraniano ha denunciado que los camiones del convoy humanitario ruso que han salido este sábado de territorio ucraniano llevaban un cargamento de material ucraniano robado.
«Según la última información, los camiones que entraron bajo la mascarada del convoy humanitario han sido cargados por rusos con material de la asociación de producción Topaz, que fabrica los radares más avanzados, como el Kolchuga, y equipo de la planta de Lugansk que fabrica munición para armas cortas», ha asegurado el portavoz del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa ucraniano, Andrii Lisenko, según recoge la agencia de noticias rusa Ukrinform.
El convoy de camiones rusos con 220 vehículos entró el viernes en Ucrania sin permiso de las autoridades de Kiev y ha regresado ya en su totalidad a territorio ruso, según han podido constatar los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
La operación de retorno se ha producido entre las 10.00 y las 14.15, hora local, a través del paso de Donetsk-Izvarino, según un comunicado oficial de la OSCE.
El convoy esperaba para entrar en Ucrania desde el pasado 12 de agosto con unas 2.000 toneladas de ayuda humanitaria, sobre todo alimentos, para la población del este de Ucrania, afectada por los combates entre los separatistas prorrusos y las fuerzas del Gobierno de Kiev.
Las autoridades rusas y ucranianas intentaron negociar una fórmula para permitir que la ayuda humanitaria llegue a los civiles, sin que para ello sea necesario que personal ruso entre en territorio ucraniano. Las conversaciones no tuvieron éxito y Moscú decidió unilateralmente que el convoy atravesara ayer la frontera hasta Lugansk, una de las zonas más afectadas por los combates.
El Gobierno ucraniano, aun sin dar permiso a la entrada de los camiones, decidió no tomar ninguna medida de represalia para no agravar aún más la situación.