Los profesores universitarios japoneses Isamu Akasaki y Hiroshi Amano y el estadounidense de origen nipón Shuji Nakamura han sido galardonados con el Premio Nobel de Física por su invención de la luces azules LED (siglas en inglés que corresponden a la denominación Diodos Emisores de Luz), que han permitido obtener «fuentes de luz blanca brillantes y que ahorran energía».
El anuncio del galardón lo ha realizado este martes por la mañana el secretario permanente de la Real Academia Sueca de las Ciencias, Steffan Normak, en una comparecencia retransmitida en directo por la organización de los Premios Nobel.
La Academia Sueca de las Ciencias ha explicado en un comunicado que este año ha premiado la invención de una «nueva fuente de energía eficiente y respetuosa con el medio ambiente».
«Con el espíritu de Alfred Nobel, el premio reconoce una invención que aporta un gran beneficio a la Humanidad: empleando luces azules LED, la luz blanca se puede generar de una nueva forma. Con la llegada de las lámparas LED tenemos más alternativas duraderas y más eficientes a las antiguas fuentes de luz», ha afirmado.
La Academia ha destacado que la invención de los profesores Akasaki, Amano y Nakamura a principios de los 90 ha supuesto «una transformación fundamental de las tecnologías de iluminación». «Los diodos verdes y rojos habían estado rondando durante bastante tiempo pero, sin la luz azul, las lámparas blancas no podrían haber sido creadas. A pesar de los considerables esfuerzos, tanto en la industria como en la comunidad científica, las luces azules LED habían sido un reto durante tres décadas», ha explicado.
La institución sueca ha subrayado que estos tres profesores universitarios han triunfado «donde todos habían fracasado». En concreto, Akasaki trabajó con Amano en la Universidad de Nagoya, en Japón, mientras Nakamura hacía sus investigaciones en la empresa nipona Nichia Chemicals, una pequeña firma de Tokushima. «Sus inventos fueron revolucionarios. Las bombillas incandescentes iluminaron el Siglo XX; el Siglo XXI será iluminado por las lámparas LED», ha pronosticado la Academia.
En este sentido, ha asegurado que las lámparas LED emiten una luz blanca utilizando la energía de forma eficiente y son duraderas, además de estar mejorando sus capacidades «constantemente». Este continuo avance ha permitido alcanzar un récord de más de 300 lúmenes-watio frente a los 16 de una bombilla y los 70 de los fluorescentes.
La Academia Suecia de las Ciencias ha recordado que las luces LED contribuyen a «ahorrar recursos de la Tierra», toda vez que tienen una vida estimada de unas 100.000 horas, frente a las 1.000 horas de las bombillas incandescentes y las 10.000 de los fluorescentes.
«Las lámparas LED son una clara promesa para mejorar el nivel de vida para más de 1.500 millones de personas en todo el mundo que no tienen acceso a las redes eléctricas: debido al poco consumo que requieren pueden ser alimentadas por plantas solares locales», ha explicado.
Por último, la Real Academia Sueca de las Ciencias ha recordado que la luz azul LED fue inventada hace «solo» 20 años pero «ya ha contribuido a crear luz blanca en una forma completamente nueva para beneficiarnos a todos».
Nacido en Chiran (Japón) en 1929, Isamu Akasaki es doctor y profesor distinguido de la Universidad de Nagoya y profesor en la Universidad de Meijo. Hiroshi Amano, nacido en 1960 en Hamamatsu (Japón), es también doctor y profesor distinguido de la Universidad de Nagoya. Por su parte, Shuji Nakamura tiene nacionalidad estadounidense aunque nació en Ikata (Japón) en 1954. Además de ser doctor de la Universidad de Tokushima, es profesor de la Universidad de California, en Santa Bárbara (Estados Unidos).
El Nobel de Física esta dotado con ocho millones de coronas (882.000 euros) que se reparten a partes iguales entre los galardonados.