Al menos quince personas han muerto en dos atentados con bomba perpetrados este lunes en dos puntos distintos de Bagdad, la capital iraquí, según han informado fuentes médicas y policiales.
Un atentado perpetrado por un terrorista suicida contra un puesto de control en el barrio chií de Kadhimiya ha matado a trece civiles y ha dejado más de 30 heridos, según las fuentes consultadas. Este barrio alberga uno de los santuarios más sagrados del islam chií y ha sufrido diversos ataques en los últimos meses.
Posteriormente, dos personas han muerto por la explosión de una bomba en una de las calles principales de un suburbio del norte de Bagadad, según han indicado fuentes médicas y policiales. Hasta el momento, ningún grupo ha reivindicado la autoría de estos ataques. Estado Islámico, una escisión de Al Qaeda que tiene bajo su control amplias zonas de Irak y Siria, suele atentar contra barrios chiíes en la capital de Irak.
Este fin de semana ha terminado con 37 muertos por una serie de atentados perpetrados el sábado en Irak. A pesar de la violencia, el Gobierno decidió la semana pasada retirar el toque de queda nocturno en Bagdad para recuperar la normalidad.