El Departamento de Justicia estadounidense ha dado a conocer los resultados de un informe que se publicará este miércoles y en el que se acusa a la Policía de Ferguson, Misuri, de tener prejuicios raciales y de violar repetidamente los derechos constitucionales de ciudadanos, con acciones como detenciones sin causas probables o un uso excesivo de la fuerza.
El estudio concluye que pese a que la población afroamericana representa el 67 por ciento de los habitantes de Ferguson, un 93 por ciento de las detenciones realizadas entre 2012 y 2014 fueron a personas de dicha minoría racial.
Según informa The Washington Post, el informe se conoce mientras el Departamento de Justicia trata de negociar con el departamento de policía de Ferguson un cambio en sus prácticas. En caso de no llegar a un acuerdo, el ministerio podría presentar una demanda, como lo ha hecho en contra de las fuerzas del orden en otras jurisdicciones en los últimos años.
Otro de los resultados muestra que los afroamericanos representan un 85 por ciento de las personas paradas por la Policía y un 90 por ciento de las citaciones policiales fueron expedidas a negros. El informe se basa en más de un centenar de entrevistas en Ferguson, así como en más de 35.000 documentos de la Policía local.
El Departamento de Justicia publicará esta semana este informe, que también contienen pruebas de prejucios raciales encontrados en correos electrónicos escritos por miembros de la Policía y los Tribunales municipales. En un mensaje escrito en noviembre de 2008 se escribía que el presidente Obama no podría mantener el cargo por mucho tiempo ya que «los negros mantienen sus trabajo estable solo cuatro años».
La institución no ha especificado más detalles sobre el informe y los funcionarios federales han facilitado bajo condición de anonimato un avance antes de un lanzamiento previsto esta semana.
El pasado mes de agosto, Michael Brown, un joven afroamericano murió a causa de los disparos de Darren Wilson, un policía blanco de Ferguson, hecho que desató una serie de protestas en la ciudad del medio oeste.
Las manifestaciones contra la discriminación racial se repitieron en todo Estados Unidos cuando a finales de noviembre el agente fue declarado inocente por el gran jurado de Misuri.